Girona buscará aprovecharse del mar de dudas groguet

Veintisiete jornadas después, Pablo Machín ha conseguido algo que muy pocos esperarían a principios de temporada: Meter de lleno a su innovador Girona en la pelea por una plaza de Europa el próximo año. El conjunto del norte de Catalunya ha logrado, a base de trabajo y regularidad, establecerse con relativa comodidad en la zona media-alta de la tabla, siendo además uno de los claros favoritos a llevarse el premio a “rookie” del año gracias a sus impresionantes resultados. En frente tendrá al Villarreal de Calleja. El submarino amarillo llega al encuentro inmerso en un mar de dudas provocado por los pobres resultados cosechados en los últimos encuentros, la reciente eliminación de Europa League y el bajón de rendimiento de algunos jugadores clave. Calleja se enfrenta a su primera gran crisis como entrenador groguet con esperanza de poder salir adelante pronto siendo constante con la idea de juego que implantó desde que llegó al primer equipo amarillo.

Cuatro puntos separan a ambos equipos en la tabla de clasificación. Sexto clasificado contra el octavo. Una situación totalmente diferente a la que dio lugar en el partido de ida. Aquel encuentro acabó con un marcador de uno a dos a favor del Villarreal y con un submarino amarillo que conseguía definitivamente ver la luz tras la destitución de Fran Escribá mientras que el Girona se encontraba al borde del descenso debido a la falta de resultados. Bakambu resultó decisivo en la consecución de la victoria gracias a un doblete que colocaba al punta congoleño como uno de los máximos goleadores del campeonato. Pero, para desgracia del Villarreal, el delantero emprendió un viaje de no retorno a China dejando desamparado de un goleador y referente al ataque groguet. Entrados a mes de marzo, siguen sobrevolando con aun más intensidad las dudas alrededor de si fue correcto haberle dejado marchar o sí se debería haber traído un mejor recambio que Roger Martínez, el cual esta todavía muy alejado del rendimiento del africano. Caso contrario el del Girona. El club rojiblanco llega con Portu y Stuani en su mejor momento de forma con ambos superando más de los diez tantos en esta temporada. Un autentico alivio para Machín el poder contar en su plantilla con una de las mejores duplas goleadores de nuestra Liga.

Los locales llegan a este encuentro, como ya se comentó anteriormente, con una racha de una sola victoria y empate en siete partidos consecutivos. Unos números más pobres para un equipo que hasta había llegado a plantearse hace unas cuantas jornadas la posibilidad de poder entrar en la lucha de Champions League con el solvente Valencia de Marcelino. Todavía sin el capitán Bruno Soriano, al que no se le espera esta temporada, ni a Nicola Sansone, que se espera que vuelva la próxima semana a los entrenamientos, el Villarreal llega al encuentro con una gran mayoría de sus jugadores disponibles. La sorpresa de la convocatoria fue la inclusión de Manu Morlanes, perla aragonesa de la cantera groguet, en detrimento de Denis Cherysev. Javi Calleja comentó en rueda de prensa que ve al joven jugador preparado para ir entrando en los planes del primer equipo aunque, por ahora, el canterano tendrá que esperar a la evolución de los problemas físicos de Javi Fuego para saber si al final es descartado o no para el partido del sábado. El entrenador madrileño también tuvo buenas palabras para el Girona: “Es un rival que viene haciendo las cosas muy bien durante toda la temporada, con una forma de jugar muy poco vista en Primera División. Llegan en un muy buen momento y tienen a jugadores arriba en un muy buen momento de forma como Portu o Stuani”.

Por otra lado, el Girona llega con casi todos sus efectivos disponibles para este encuentro. Solo la importante baja de Aday Benítez y la de José Aurelio forman parte del parte de lesionados del club rojiblanco. Fuera de la convocatoria se quedaron, entre otros, Iraizoz, el cual viene contando muy poco para Machín desde que Bono se hiciera con la titularidad en octubre, Olunga y Kayode. Destaca la entrada, en sustitución del portero vasco, del canterano Marcel que estará como portero suplente mañana y la vuelta de Mojica desparecido en los últimos partidos por unas molestias. “Si no hubiéramos conseguido ganar al Celta no estaríamos tan cerca de ellos ahora. Poco a poco nos damos cuenta de que podemos competir con cualquiera. Nadie a principio de temporada hubiera dicho que somos rival del Villarreal” dijo Machín en cuanto a la situación en liga de su equipo. También se mostró ambicioso el entrenador de cara al partido de mañana: “Es un aliciente que tenemos. Llevamos muchas jornadas sin hacerlo y siempre hemos dicho que conseguirlo en cualquier competición es difícil. Ahora sería dar un puñetazo encima de la mesa y sobre todo creer que somos capaces de poder hacerlo”.

Por @JFranF1