Se daban cita en Balaidos dos equipos en época de necesidad. El Celta cercano al ascenso, buscaba volver a sumar los 3 puntos que le dieran un respiro. Al otro lado, el Huesca, un equipo muy necesitado por sumar una victoria para volver a engancharse a la zona de la salvación.
Los primeros compases de partido fueron muy igualados, donde se vio un Huesca atrevido y un Celta muy bien posicionado.
La primera ocasión llegaría para el conjunto visitante. Rivera tuvo un cabezazo en el área pequeña que inexplicablemente se fue fuera.
Después de esa jugada, el Celta, presionado por su público, se hizo con el dominio del encuentro.
En una gran jugada de Hugo Mallo llegaría el primer gol del encuentro. El capitán vigués puso un pase preciso tras una gran carrera para que Iago Aspas adelantara al conjunto local.
El partido se fue al descanso por ventaja por la mínima del conjunto gallego. Francisco, entrenador visitante, efectuó un doble cambio para intentar dar un cambio de imagen a su equipo y que tuviera mas presencia en el encuentro.
El equipo aragonés intentó reaccionar pero sin éxito. El Celta consiguió dominar el partido y en un balón largo Iago Aspas sentenció el partido con un tacón contra Akapo para el recuerdo que definió con mucha clase frente a Jovanovic.
El conjunto local no sufrió en ningún momento por el resultado y acabó con un 2-0 contundente. El Huesca no supo generar apenas situaciones de peligro frente a la portería de Rubén Blanco.
El Celta respira con esta victoria y se aleja de los puestos de descenso. Primera victoria desde la llegada del entrenador luso.
El Huesca se hunde a pasos agigantados y se queda en una situación más que critica. Lleva sin conocer la victoria desde la jornada 1 y solo ha conseguido sumar 7 puntos. La próxima jornada recibirá al Real Madrid en el Alcoraz.