Remontada amarilla que deja todo abierto para la vuelta
Villarreal y Espanyol empatan un partido que los visitantes dominaron durante 70 minutos. Enorme respuesta del conjunto local en los 10 minutos finales, que neutralizaban la ventaja perica. La eliminatoria se queda totalmente abierta para la vuelta en Cornellà.
La Copa del Rey se estrenaba en este año 2019 con la ida de la ronda de octavos de final para enfrentar a Villarreal y Espanyol. Para el choque, las rotaciones se convirtieron en la máxima para ambos entrenadores, aunque Luis García Plaza las empleaba más que Rubi. Por parte del Villarreal, hasta 8 titulares descansaban para jornadas ligueras, como Fornals o Chukwueze. En el caso del Espanyol, Rubi daba respiro a menos titulares, entre los cuales se encontraban Víctor Sánchez, Baptistao o Marc Roca.
Dominio perico
El partido comenzaba con según lo previsto. El Espanyol buscaba llegar a portería rival a base de posesiones largas y de construir desde atrás. Y le funcionaba. Un remate de cabeza que chocaba en la madera y un disparo lejano daban el susto en La Cerámica. Estaba mejor plantado el club ‘perico’, pues apretaba muy bien la salida de balón ‘grogueta’, quienes solo podían buscar en largo las carreras de Toko Ekambi.
El 4-4-2 que planteaba Luís García no funcionaba, nadie aparecía como enlace entre el centro y la delantera. A consecuencia, muy caro lo pagaba el Villarreal, ya que una pérdida en el centro del campo la recogía Darder, quien de un derechazo raso desde la frontal inauguraba el marcador. 0-1 y con buenas sensaciones de los visitantes. El ‘Submarino amarillo’ no encontraba la forma de superar la presión de los barceloneses mas que una clara ocasión que Pedraza desaprovechaba tras pase atrás de Jaume Costa en línea de fondo.
El dominio de los visitantes era evidente y claro. Además, se traducía en claras ocasiones de gol que cerca estaban del 0-2, como un remate a bocajarro de Hernán Pérez que Andrés acertaba a despejar. Quizás el Villarreal firmó la peor primera parte de su temporada, y es mucho decir de un equipo que está en posiciones de descenso. El Espanyol se quedaba corto, por su futbol, con un 0-1 en el marcador al descanso.
Segunda parte
Ambos equipos salían de vestuarios sin cambios, pero Luis García realizaba un cambio de formación importante: Ekambi se situaba en banda y Raba como enganche. Esto suponía más mordiente y verticalidad en banda, lo cual aprovechaban bien los minutos iniciales.
El Villarreal discutía más la pelota al Espanyol, y subía también su presión a la defensa espanyolista. Fruto de esta presión llegaban claras oportunidades primero de Raba, y después de Carlos Bacca, pero tanto Rosales como Roberto evitaban los goles en boca de gol. Parecía resurgir el ‘Submarino amarillo’ tras la entrada de Iborra y Fornals, pero los ‘pericos’ golpeaban de nuevo. Subía el 0-2 al marcador (confirmación del VAR presente) tras un auténtico golazo de Alex López que, con un potente disparo, batía a Andrés Fernández.
Minutos finales de infarto
Llegados los últimos 10 minutos, el cuadro local obtenía la recompensa al cambio producido en el descanso. Toko Ekambi recortaba distancias con un precioso remate de cabeza al que Roberto no pudo llegar. El marcador señalaba el 1-2 y los locales apretaban y jugaban más que sus rivales.
El Villarreal encerró al Espanyol en su área, y el empate, obra de Carlos Bacca, se materializaba con otro cabezazo desde dentro del área. La enorme respuesta del Villarreal al gol de López es digna de alabar, como el cambio de aires que Fornals e Iborra dieron al ‘Submarino’. Con el 2-2, el Espanyol solo achicaba balones y la pelota era propiedad del cuadro local.
El partido llegaba al pitido final con un Villarreal lanzado a por la victoria. Curioso partido que refleja lo que es el futbol: el Espanyol dominó durante más de 70 minutos, pero una notable mejoría ‘grogueta’ fue suficiente para empatar el partido. Los locales deben mejorar su juego para conseguir resultados positivos, mientras que los visitantes no pueden dejar escapar un resultado tan positivo en los minutos finales.
