Hundidos en la miseria

Grandes precipitaciones han caído en Vigo durante la presente semana y tal como hace justo dos años ante el Real Madrid -en el famoso partido suspendido por el vuelo de varias uralitas de la grada de Río-, el rótulo de la presente previa, puede ser una buena metáfora de los últimos días de los contendientes este sábado en el coliseo olívico.

El Celta encadenó en Zorrilla su quinta derrota consecutiva, en el que se antojaba como un claro ultimátum para el preparador portugués Miguel Cardoso, quién fue ratificado este lunes, con la última bala de rascar algo ante el Sevilla. Por su parte, el conjunto de Pablo Machín cayó con estrépito el pasado miércoles en el Camp Nou (6-1), desaprovechando la suculenta -y a la postre insuficiente- renta que traía de la ida en el Ramón Sánchez Pizjuán y perdiendo una gran opción a entorchado en esta temporada, tras no noquear al gran favorito -imagen superior-.

Otro apartado a resaltar es el mercado de fichajes de invierno, recién concluido este jueves, en el que Felipe Miñambres no contentó a su parroquia, sumisa en una situación calcada a la temporada 2012-2013, donde a estas alturas contaba con un punto menos en su bagaje. Llegaron el holandés Wesley Hoedt, que causó buenas vibraciones en su debut pucelano, pero que fue expulsado rigurosamente en los estertores del choque con doble amonestación. Para reforzar el flanco izquierdo, tras la marcha del eslovaco Robert Mazan, llegó el argentino Lucas Olaza, quién ya estuvo en el filial celeste hace 3 temporadas. Y el tercero en discordia, vino desde Heliópoli. Sin embargo, no se trata del goleador deseado, como es el caso de Sergio León -quién fue determinante en la clasificación bética para la semifinales coperas-; el elegido fue el argelino Ryan Boudebouz, que atesora una gran calidad, pero no es el perfil adecuado para estos momentos delicados en las filas olívicas, donde se demandaba un jugador con carácter y que se fajase por el escudo que defenderá a partir de ya.

Otros tantos llegaron a las filas hispalenses en esta ventana invernal (uno por cada línea de hombres de campo). Son los casos del central austríaco Maximiliam Wöber (con sus primeros minutos jugados ante el Levante), el centrocampista napolitano Marko Rog y el ariete ex-barcelonista Munir -baja mañana por daño en los aductores-. Savia nueva para reforzar una plantilla, ya de por sí bastante compensada, que tiene a la vuelta de la esquina su competición fetiche -la Uefa Europa League– y con la cruz de no vencer fuera del Ramón Sánchez Pizjuán desde septiembre en el torneo doméstico, pese a estar asentado en la cuarta plaza.

Los precedentes del Celta de cara a este encuentro son poco alentadores, ya que lleva 3 jornadas consecutivas adelantándose en el marcador, exhibiendo a posteriori su patológica endeblez defensiva y con la nula capacidad de remontar los envites cuando se ve por detrás en el marcador. Los pupilos de Pablo Machín, dispondrán de la octava tentativa liguera de llevarse los 3 puntos lejos de su feudo. La ocasión lo merece para ellos, ya que el Celta alberga en su historia moderna el desgraciado cartelito de ir “resucitando” rivales. Ya en la nostalgia, si en el anterior encuentro en Balaídos se calibró el enésimo retorno de Santi Mina con división de opiniones, mañana comprobaremos como se recibe al catalán Sergi Gómez, que militó 4 temporadas en el cuadro gallego. Quizá sea mejor de la que le esperaría a Manuel Agudo Durán “Nolito“, actualmente recuperándose de una fractura de peroné.

Dos de los mejores ataques del campeonato, pero no frente a frente. Si por parte gallega, entre Iago Aspas y Maxi Gómez, llevaban a golpe del 8 de diciembre 18 goles; por el bando andaluz, con el tridente compuesto entre el madrileño Pablo Sarabia, el galo Wissam Ben Yedder y el luso André Silva, suman 24 dianas, repuntadas con la manita al Levante el pasado sábado, donde mojaron los tres sevillistas.

En el capítulo de enfrentamientos anteriores, recopilamos el hat–trick del pasado mes de abril del indiscutible Iago Aspas (4-0) -quién cumplirá mañana su quinta ausencia del equipo, con sendas derrotas de los suyos-, la terna de tantos de Vicente Iborra en la campaña de Jorge Sampaoli (0-3), las igualadas a 1 tanto en la 14/15 y 15/16 y las victorias en 2012 y 2014, por respectivos 2-0 y 1-0 de los vigueses.

Si la baja del moañés es más que salientable para los intereses de los locales, qué decir del campeón del mundo en 2010, Jesús Navas, que tras su vuelta a la capital andaluza está gozando de una segunda juventud, ocupando una posición menos relevante en el campo, pero tan vistosa, por su enorme entrega. Por parte céltica, vuelven a la convocatoria Okay Yokuslu y David Costas. Además Boudebouz puede disponer de sus primeros minutos con la zamarra olívica.