El Dépor frena su progresión ante un buen Tenerife

Arrancaba el partido en el Abanca Riazor con dos equipos con rachas muy opuestas, por un lado, los gallegos que jugaban en casa donde todavía no han perdido de local y, por otro lado, el equipo tinerfeño que aún no sabe lo que es ganar a domicilio; ambos, por lo tanto, aspiraban a conseguir la victoria, unos para seguir invictos en casa y otros para romper su sequía a domicilio. Sin embargo, al margen de las estadísticas de unos y otros, el partido estaría también marcado por le vuelta de José Luis Oltra a Riazor y por la presencia de los nuevos fichajes invernales en el terreno de juego.

Y así, comenzaba el partido en A Coruña con mucho frío y lluvia y con la primera ocasión del partido en el minuto 8 para el equipo visitante. Falta escorada a la banda que saca Suso en corto hacia Luis Milla y éste centra al área y Jorge remata de cabeza al primer palo logrando despejar Dani Giménez a córner. En la primera media hora de partido había mucha igualdad con posesiones largas para unos y otros pero sin ninguna oportunidad más clara, salvo algún disparo esporádico de los locales que siempre se marchaban por encima de la portería defendida por Dani Hernández.

Fue en el minuto 35 cuando llegaría la primera ocasión para el Deportivo en un disparo desde fuera del área de Borja Valle que toca en un defensor visitante y el balón se marcha a córner rozando el palo. Y, muy pronto, en el minuto 40 llegaría una ocasión clara también para el Deportivo, en una muy buena internada de David Simón que logra meter un balón en el área pero Quique González remata alto. Y con poco más se llegaría al descanso del partido con empate a cero en el marcador.

Arrancaba la segunda parte en tierras gallegas con un primer cambio, se quedaba en el vestuario Montañés por parte del Tenerife y en su sustitución entraba José Naranjo. Un dato llamativo en el comienzo de esta segunda parte es que en el minuto 56 ya habían amonestado a cuatro jugadores con tarjeta amarilla y los cuatro eran jugadores del centro del campo, lo que explicaba la dureza  y el ansia que tenían ambos equipos por hacerse con el control del esférico, que era dominado por uno y otro equipo, sin aparecer ocasiones claras de gol.

El Deportivo de la Coruña seguía sin ocasionar peligro ante la portería defendida por Dani Hernámdez, aunque a veces se aproximaba, como en el minuto 60 con un disparo de Quique González pero su disparo se marcharía, una vez más, alto. Iba transcurriendo la segunda parte en un partido envuelto por los cambios, por el demonio alterno de la pelota por parte de ambos equipos pero donde las ocasiones de gol brillaban por su ausencia.

Sin embargo, en el minuto 82 llegaría la mejor ocasión del partido para el Deportivo, saque de banda y Quique González logra deshacerse de los defensas tinerfeños y dispara pero el balón pasa rozando el palo de la portería de Dani Hernández. Y fue a partir de ese momento cuando el equipo local se mostró mucho más ambicioso en busca del gol que le diera la victoria. Y en la última jugada del partido estuvo apunto de conseguir el gol en una falta que Dani Hernández con serios apuros logra atrapar. El marcdor no se movería y partido acabaría con 0-0.

Un punto que le sabe a poco al Deportivo de la Coruña que jugaba en casa pero que le sigue manteniendo invicto de local. Y en el caso del Tenerife un punto que le sabe algo más, pero que le impide romper su racha negativa a domicilio. Merecido punto para ambos equipos en un partido muy igualado.