El Girona saca tres puntos ante un escaso Rayo

El partido inaugural de la jornada comenzaba con el equipo local volcado arriba buscando dominar el encuentro desde los inicios. El técnico local había vuelto a cambiar la formación con la intención de buscar algo que cambie los últimos resultados.

El Girona salí replegado y ordenado defensivamente. La primera ocasión del encuentro se producía en el minuto 4 de encuentro tras un buen remate de Embarba, que obligaba a Iraizoz despejar a córner. Tras el saque de esquina, Mario Suárez remataba y se marchaba ligeramente por encima del travesaño.

La primera tarjeta del encuentro la recibía el centrocampista de Rayo por saltar con los brazos extendidos y golpear a Borja García. El encargado de botar la falta sería Álex Granell que obligaba al meta macedonio a despejar de puños y lanzar una contra que acabaría en un nuevo córner a favor de los vallecanos.

El Rayo estaba dominando el encuentro pero el Girona tenía dos referencias arriba y en cualquier posibilidad de contra no dudaban y salían lanzados hacia la meta local.  La mas clara la disfrutaría Portu que lanzaba inexplicablemente arriba de la meta local tras un buen centro de Pere Pons. En la siguiente jugada, Granell lanzaba el esférico al larguero, el Girona estaba cerca del primer tanto.

El Rayo parecía encontrar la calma a través de la posesión y el equipo local disfrutaba de la mayor posesión a través de una presión asfixiante. Al Girona en cambio, no se le veía nervioso sin tener el protagonismo y cada vez que tenía el balón se acercaban al área con una tranquilidad asombrosa.

El primer tanto del encuentro lo producía  Stuani.  El uruguayo remataba a bocajarro a Dimitrievski que no podía hacerse con un balón suelto que recorría el área y el delantero batía por abajo al portero para poner el primer tanto visitante, 0-1.

El Rayo obligado a remar a contracorriente no parecía encontrar soluciones y en el minuto 37 de encunetro volvía a tener el segundo susto. Pere Pons le robaba un balón muy peligroso a Santi Comesaña en la salida del esférico y remataba a la madera con fortuna tras empotrarse el cuero en Abdoulaye Ba.

El Rayo estaba teniendo mayor posesión de nuevo, pero el Girona había sabido aprovechar la ocasión que había tenido hasta el momento. RDT disfrutaría de una falta al borde de la frontal como le gustan pero Iraizoz lograba despejar el disparo directo a córner. Esta sería la última jugada a destacar de  la primera parte.

La segunda mitad comenzaba con el mismo guión. El Rayo necesitado de puntos debía remontar el resultado adverso y anotar dos tantos. Míchel mandaba a calentar a Kakuta que llevaba cuatro meses sin entrar en una convocatoria.

La primera gran ocasión se producía en el minuto 48 de juego tras un buen remate de Abdoulaye. Míchel no tardaría en realizar la primera sustitución, en el minuto 52 de encuentro ingresaba Kakuta en el puesto de Trejo.

El Rayo parecía tener mayor intensidad tras la salida de Gael Kakuta y contaría con una ocasión formidable tras una buena recuperación de Mario Suárez que entraba en el área y dejaba de tacón a Embarba que disparaba contra el pie de Gorka Iraizoz.

En la siguiente jugada era Álvaro el que se marchaba en velocidad y cedía a  Embarba que no lograba rematar el esférico y se paseaba por todo el área. En la siguiente jugada tras un error de Advíncula en la salida del balón, A.Ba se veía obligado a contra el uno para uno y sería expulsado.

El Rayo debía remontar el encuentro con un jugador menos y no estaba teniendo las ocasiones deseadas. Para ello, Míchel ingresaba a Velázquez reconstruyendo la defensa de cuatro y sacaba del partido a Mario Suárez.

El equipo franjirrojo estaba perdiendo muchos balones en la zaga y debía dar gracias por tener posibilidad de mantenerse vivo en el encuentro. Para ello el Girona ingresaba a Aleix García que entraba en el lugar de Borja García que se había vaciado.

Al encuentro tan solo le quedaban 15 minutos y el Rayo necesitaba un milagro para lograr puntuar en la noche de hoy. Míchel realizaba la última sustitución en la que Di Santo sería el delantero en entrar por Embarba. Buscaba la heroica pero el Girona hasta el momento no tenía de que preocuparse.

En el minuto 85 de juego, Stuani sentenciaba el encuentro con un tanto de cabeza tras un centro medido por parte de Pedro Porro por la derecha. El Girona necesitó tener tres buenas ocasiones para llevarse los tres puntos y coger aire ante un rival por la salvación.

El partido se enfrentaba a la recta final con un Girona bien ordenado atrás, defendiendo el resultado favorable con un jugador más y ante un Rayo impotente. Pocas ideas para un equipo que cada vez tiene más lejana la salvación.