Almería se moviliza contra Alfonso García

Se acabó. La afición almeriense no tiene más paciencia, quieren a la familia García al completo fuera del club almeriense.

Tanto Alfonso García Gabarrón, empresario murciano del sector hortofrutícola, como sus hijos, Lorena García Piñero, que está a cargo del departamento jurídico del club y Alfonso García Piñero, vicepresidente ejecutivo del club almeriense, pueden vivir sus últimos días manejando las riendas del club almeriense. Entidad que el actual presidente maneja a su antojo desde julio de 2003, tras adquirir el paquete mayoritario de las acciones de la entidad rojiblanca (un 95% de las acciones).

La nefasta gestión, la falta de transparencia, el baile de cifras desde un lado hacia el otro, el faltar la verdad al aficionado no han hecho nada más que calentar la lava de un volcán. Un volcán que ha entrado en erupción tras la decisión de Fran Fernández al no aceptar seguir en el banquillo almeriense. Los aficionados más jóvenes y menos jóvenes, recuerdan estos días el continuo maltrato sufrido por parte del empresario murciano. Muchas y diferentes vivencias que conducen a un mismo destino: las arcas del murciano.

¿Por qué se despidió a Francisco Rodríguez Vílchez? ¿Por qué no continuó Javi Gracia tras conseguir el ascenso? ¿Corona sí y por qué José Ortiz no? ¿Por qué hay una desbandada de jugadores temporada tras temporada? ¿Por qué Fran Fernández ha decidido no continuar? ¿A donde va todo el dinero de las ventas de los jugadores? ¿Por qué jugadores de casa como Nino, Diego Capel o Salva Sevilla no han acabado de rojiblancos?

Son demasiadas incógnitas para una ciudad que no puede más con la pasividad y la idolatría de un empresario murciano que ha perdido desde hace mucho tiempo el timón de un barco que se le ha quedado muy grande.

Por todo, y bajo el lema “Alfonso García, fuera de Almería” la afición almeriense no aguanta más la gestión del actual presidente del club. A través de las redes sociales, han convocado una manifestación que partirá a las 11:00 horas desde la rotonda situada en frente del Palacio Municipal Juegos del Mediterráneo para posteriormente dirigirse a la sede del club. Una vez allí mostrarán este descontento y pidiendo la marcha de Alfonso García de la entidad indálica.