Junio termina y con ello comienza julio, donde en muchos hogares habrá vacaciones, en Vallecas no. Y es que, la dirección y el cuerpo técnico rayista no descansará con el fin de confeccionar una plantilla competitiva para la Liga 123 y soñar así con un nuevo ascenso. Por ello, con el comienzo del verano, en lugar de descanso habrá más trabajo que nunca.
David Cobeño, el presidente Raúl Martín Presa y Paco Jémez están en contacto directo para intentar renovar a jugadores que el técnico quiere mantener y, lógicamente, en busca de fichajes. Las llegadas, hasta el momento, van más lentas porque el primer objetivo del club es saber con quién de la actual plantilla va a poder contar para la próxima temporada. Por ello, ya hemos visto renovaciones e incorporaciones de jugadores del filial como Adrián Carrasco. La renovación más sonada fue la de Mario Suárez, un jugador que ha demostrado la relevancia que tiene en los esquemas de Paco Jémez. Mario Suárez es una pieza fundamental en Vallecas y es la primera piedra para la vuelta a la Primera División.
Las marchas aún no se definen del todo, ya que el club ha establecido una política estricta, todo jugador que se quiera ir se tiene que remitir a su cláusula de rescisión. Este es el caso de Álex Moreno, lateral izquierdo que fue de lo mejor del equipo madrileño la pasada campaña. El Betis lo quiere, pero tendrá que terminar pagando su cláusula. De este modo, el Rayo hará caja con aquellos jugadores que se quieran ir. Otros, por fin de contrato no parece que continúen, como es el caso de Luís Advíncula. A pesar de ello, la directiva del club está en negociaciones de renovación con varios jugadores para mantener un bloque sólido. Mario Suárez fue sólo el inicio.
En cuanto a llegadas, de momento sólo se puede hablar de jugadores que regresan de cesión como Joni Montiel y de que la dirección deportiva está buscando oportunidades de mercado en clubes como el Getafe, donde se vio el otro día a Presa entrando a sus oficinas.
Así pues, se puede dilucidar un verano movido por la barriada más conocida de Madrid con objetivos claros: renovaciones con compromiso, hacer caja remitiéndose a la cláusula de los jugadores y fichar jugadores de calidad, pero de oportunidad en el mercado.