Icono del sitio Grada3.COM

La Fonteta tiene la clave para el Top8

Quizá cuando empezó la temporada.era una aspiración utópica más que real. El inicio de competición no fue el soñado y los objetivos parecieron ir variando, pero poco a poco, con perseverancia, buen juego y mejores resultados, el Valencia Basket se ha instalado en las posiciones que dan derecho a disputar las eliminatorias previas a la gran final four de Colonia. 

Ambiente de gala

El ambiente que se genera en el pabellón valenciano empuja y mucho a su equipo, un equipo el de Ponsarnau que se siente casi imbatible cuando juega al abrigo de los suyos. Una parroquia fiel, animosa y entregada a sus colores y a sus jugadores. Cuando la Fonteta ruge, cuando los decibelios se dejan sentir por toda la Avda Hermanos Maristas, las canastas casi entran solas.

Son con estas condiciones, situaciones y circunstancias en las que los rivales por la séptima y octava plaza pasarán por Valencia para dirimir sus posibilidades en esos enfrentamientos directos. De su fortaleza dependen un alto porcentaje de alcanzar el éxito y por su afición no va a quedar.

Rivales directos

Milan, Fenerbahce, Zalguiris y Estrella Roja han de visitar la capital del Turia y con esas 4 victorias, la clasificación sería mucho más una realidad que aquel lejano objetivo del mes de septiembre. Un Top8 que le permitiría, casi con total seguridad, volver a disputar la máxima competición del baloncesto europeo.

El viernes de baloncesto se está convirtiendo en toda una tradición en la periferia de la capital valenciana y cada vez son más los parroquianos fieles y fijos que acuden sin falta a esa cita. Patrocinadores, colaboradores e instituciones van de la mano para que el baloncesto al máximo nivel sea estable y continuo. El proyecto de la Alquería, del Valencia Arena y de ese complejo de la ciudad del basket necesita de buenos resultados que no permitan perder lo que tantos años ha costado consolidar.

La estabilidad de la plantilla también permite una mayor identificación entre jugadores y público, entre protagonistas en la cancha y fuera de ella. Al grito de Soroll (ruido) Fonteta!!!, los flyers, aplaudidores y demás implementos de animación hacen subir el volumen, la temperatura y las pulsaciones de todo el que allí dentro se encuentra. Que continúe la fiesta. Larga vida al baloncesto.

@VicentSarrion

Salir de la versión móvil