Ramiro Funes Mori (Mendoza, Argentina, 5 de marzo de 1991) no está pasando su mejor temporada en Villarreal. Apenas ha jugado 12 partidos -muchos en Copa-, logrando un gol y no es desde luego un hombre importante para Javier Calleja. Es por eso que el central argentino que el club groguet firmó en verano de 2018 desde el Everton a cambio de nueve millones de euros, esté descontento con su rol en el equipo. Hasta el punto de querer salir tan pronto sea posible.
Eso es lo que declaró a Fox Sports Argentina la noche del pasado miércoles. Fue en una entrevista en la que no se mordió la lengua precisamente. Lo primero confirmó su malestar por no jugar lo mismo que la pasada campaña: “No siempre tiene que estar en competición y últimamente no estaba jugando. Bueno sí que tocó jugar los últimos seis partidos porque se lesionó el otro central (Pau Torres), pero bueno no me tienen tan en cuenta […] No sé que ocurre este año se tiene en cuenta a otros jugadores y a mí no. Si sigo estando en esta situación me tendré que ir. Poner rumbo hacia otro lado, para poder tener continuidad en lo futbolístico“.
Además de su descontento por no jugar, también soltó buenas ‘perlas’ contra su equipo y especialmente, la afición groguet: “La gente es fanática, pero van a ver el partido de fútbol. Pero lo que he sentido acá en el Villarreal es que la gente va a ver un partido de fútbol y, no te voy a mentir, parece un partido de reservas. Cuando juego con el Villarreal, porque la gente que va a los partidos es gente grande y que va a disfrutar de la cancha. Uno por ahí necesita que te alienten y te tiren para delante, y eso por ahí te motiva un poco más”.