Una de las cosas que se le atribuye siempre al fútbol es que es de corto plazo y no tiene memoria. Y ambos son muy ciertas. Mismamente hace menos de un año, como algo más de diez meses, un grupo de futbolistas que hicieron del Fuenlabrada uno de los mejores equipos de Segunda ‘B’ y que se ganó un merecido ascenso, ahora tienen la mayor de las incertidumbres. Y es que la columna vertebral de aquel equipo acaba en su gran mayoría contrato en apenas unas semanas sin más noticias a la vista.
Jugadores como Juanma Marrero, David Prieto, Cristóbal Márquez, Hugo Fraile, Mikel Iribas, Pablo Clavería o Cristian Glauder entre otros acaban contrato. Solamente Randy Nteka tiene más vinculación con el club (hasta 2022). Todos ellos protagonistas en aquel ascenso y en la campaña actual, donde siguen siendo jugadores muy importantes en el equipo fuenlabreño que entrenaba Mere Hermoso antes de ser destituido días antes de la paralización de la competición.
Cierto que, con la excepción de los dos últimos, los demás son ya jugadores muy veteranos pero que han atravesado hasta ahora una segunda juventud por decirlo así. Además, la situación actual es cierto no ofrece ningún. Sobre todo porque hasta el parón de la competición el club atravesaba una nefasta racha de resultados que impedía ninguna toma de decisiones a futuro. Habrá que esperar a que la competición pueda reanudarse y aclararse el futuro. Pero algo es sabido como decíamos al principio, el fútbol, de memoria, va muy justo.