«Veo al equipo muy bien, lo veo igual que acabamos, como un tiro aunque veo el partido contra el Alcorcón muy difícil porque es el único equipo que no ha perdido fuera de casa y ojalá sea el sábado 13 su primera derrota», ha resaltado en declaraciones a la página web del club.
El extremo zaragocista ha explicado que el comienzo de la competición lo veían muy lejos pero ahora está muy cerca.
«Es una situación atípica tener que jugar cada tres días pero creo que el equipo se va a adaptar muy bien. Somos un equipo joven, con ambición, con ilusión de conseguir un sueño que tenemos a once partidos y hay que jugar cada partido como una final», ha destacado.
Burgui ha reconocido que la situación que vive el país y el deporte por la pandemia de la COVID-19 es algo que «nunca en la vida ha pasado» y que se ha echado mucho de menos todo, pero sobre todo «el fútbol».
«Es mucho tiempo sin poder entrenar, sin poder jugar, más de tres meses, pero bueno pesa más la ambición y la ilusión que tenemos de poder jugar con el Alcorcón y meternos en la dinámica de partidos y entrenamientos. El grupo está entusiasmado de que empiece a rodar la pelota y con muchas ganas, mucha fuerza y consciente de lo que se juega», ha asegurado.
Igualmente ha apuntado que lo que queda por disputarse del campeonato es «una liga de once partidos» en la que la plantilla del conjunto ‘blanquillo’ no piensa «más allá» del primero con el Alcorcón.
«Tenemos que empezar con buen pie. Sabemos que el primer encuentro va a ser importante», ha subrayado.
El jugador de Burguillos del Cerro (Badajoz) ha indicado también que toda la plantilla es consciente de que club no merece estar donde ha estado los últimos años.
«Tanto desde el club como desde la afición nos lo están recalcando y sabemos la importancia que tienen estos once partidos. Es un momento muy importante para la historia del Zaragoza y nos tenemos que dejar la vida en cada uno», ha recalcado.
Para ello tienen que jugar «con cabeza y sobre todo con corazón» porque son conscientes de que se juegan mucho y de que van a tener detrás a «muchísimas» personas que les van a estar apoyando desde casa.
«Eso tiene que estar en nuestra cabeza y en nuestro corazón porque va ser muy importante», ha asegurado.