Jornada nefasta para los equipos asturianos. Ni Oviedo ni Sporting lograron vencer en sus respectivos compromisos. Un hecho que provoca que ambos den un paso atrás de cara a la consecución de sus objetivos. Los de Ziganda, que ya Jugaron el sábado, cayeron en el campo del líder. El Cádiz se llevó un encuentro gris donde el acierto y la efectividad en las áreas marcó la diferencia. Los azules afrontarán un nuevo encuentro en el alambre ante Las Palmas. El cuadro de Djukic, por su parte, no pasó del empate en El Molinón ante el Girona y desaprovechan una oportunidad única de acercarse a los puestos de play-off. Posiciones que se quedan ahora a cinco puntos de distancia.
La teoría de la manta corta
- O defiendes o te expones: El dilema de la manga corta lleva persiguiendo al Sporting toda la temporada, pero ayer, en el partido clave, se volvió más patente. A nivel defensivo el equipo rozó el sobresaliente, aunque Mariño con tres buenas paradas sostuvo también al equipo. Pero en ataque la falta de mordiente fue evidente. Que solo en un lanzamiento de falta y en un córner se lograse poner en apuros a Riesgo, guardameta del Girona, habla por sí mismo.
- La falta de gol es decisoria: Cuando en dieciséis de treinta y ocho jornadas no ves puerta y en trece de las veintidós restantes solo haces uno dejas patente que no tienes gol. Y sin goles no hay amores, que ya lo decía Manolo Escobar, pero lo más importante es que tampoco hay triunfos. Unos triunfos que te tienen que colocar en las posiciones clave de la tabla. La solidez defensiva es palpable, siendo el segundo equipo menos goleado, pero eso solo te da para estar donde estás; en el undécimo puesto.
- La gasolina en reserva: Además hay otro problema. El Sporting, se vio en Almería, en Vallecas y ayer, llega muy justo de energía a los finales de los partidos. En Vallecas le costó el empate y casi el partido. En Almería le costó el partido y ayer si el Girona hubiese tenido ambición pudo haber seguido con la misma dinámica. Djukic no cuenta apenas con 11 de los 28 futbolistas que conforman el grupo actual. Los jóvenes del filial apenas participan igual que otros jugadores de segunda línea de la primera plantilla. Eso hace que su carga de minutos sea muy fuerte y acaben todos entre algodones o reventados con continuas molestias, como es el caso de Pedro Díaz.
- Solo un milagro permite seguir con opciones: Con ese empate, el Sporting se queda a cinco puntos del play-off, pero con cinco equipos entre medias. Quedan 12 puntos y las cuentas podrían salir si se ganasen los cuatro y los rivales se dejan algún punto más como han venido haciendo. Pero es algo que parece absolutamente irreal, aunque el calendario podría brindarle alguna opción según como se desarrollen estas jornadas. No obstante el próximo será en Albacete contra un equipo que se juega, literalmente, la vida y la permanencia.
Las áreas vuelven a marcar la diferencia
- Errores muy caros. El Real Oviedo cayó en el Carranza víctima de sus fallos en la parte de atrás. Los azules volvieron a fallar en los metros decisivos del terreno de juego y dejaron escapar una buena oportunidad para sumar en el feudo del líder. Dos errores en la parte de atrás y otros dos de cara a portería permitieron que el Cádiz se llevase un botín demasiado grande, sobre todo después de lo visto sobre el césped.
- Pocas cosas positivas, aunque las hay. En una situación como la que vive el equipo es difícil sacar algún aspecto positivo, y más cuando estamos tan cerca de la conclusión del campeonato. Pero el Oviedo post Carranza debe quedarse con el buen estado de forma de Lunin, que volvió a parar otro penalti y con el regreso al verde de Saúl Berjón, que en apenas diez minutos generó varias situaciones de peligro. De cara a este final de temporada, el equipo necesitará la mejor versión de ambos para lograr la ansiada permanencia.
- Montaña rusa por la salvación. La lucha por no descender vuelve a estar, una temporada más, al rojo vivo. Varios equipos se encuentran implicados en una pelea por no abandonar el fútbol profesional. El Oviedo arrancará la jornada en puestos de descenso. Ahora mismo, los azules son decimonovenos. El conjunto de Ziganda necesita sumar un triunfo ante Las Palmas para tener opciones de abandonar esas posiciones de peligro. El encuentro ante los canarios es, sin duda, el más importante para el club desde el regreso a Segunda División.
- Otra jornada de transistores. Lo peor de estas situaciones es tener que estar pendientes de lo que ocurre en otros estadios. El depender de lo que hagan otros equipos obligan a ‘jugar’ más de un partido cada jornada. Y al Oviedo le va a tocar tener su mente en el encuentro ante Las Palmas. Eso sí, de reojo también toca mirar hacia Málaga, Ponferrada, Albacete y Vallecas.