Francesc Arnau tiene bastante trabajo en su primer verano como director deportivo del Real Oviedo. Tras el pasado mercado invernal, donde su labor fue calificada como sobresaliente, ahora el catalán afronta su primer mercado veraniego. Será complicado, pues aunque el cuadro azul aspira a mantener los algo más de 8 millones de tope salarial del pasado curso, se antoja complicado. Arnau tendrá que escudriñar cada euro para formar una plantilla de mayor garantía que la de la pasada temporada.
Pero además de fichajes, tiene otra misión considerada prioritaria: la renovación de Borja Sánchez (Oviedo, 26 de febrero de 1996). El canterano ha tenido su eclosión este año con actuaciones muy destacadas. Ha disputado un total de 34 partidos, logrando 4 goles y dando 4 asistencias, pero con actuaciones que han llamado la atención de otros equipos. Concretamente, según El Periódico de Aragón, gusta mucho en el Real Zaragoza, pero también se habrían interesado en él Osasuna y Alavés.
La cláusula del ovetense es de tres millones de euros y su contrato expira en 2022. El hecho de que sea baja y nada prohibitiva para ambos conjuntos de Primera División, así como para el cuadro maño en caso de ascenso. No obstante Borja Sánchez da total prioridad a la renovación por el Real Oviedo. El jugador sabe que está en casa y se siente importante, algo que el club también quiere premiar con una renovación que aumente su cláusula para ‘espantar’ esos intereses.
De esta forma solo en el caso de un divorcio en medio de las negociaciones por su renovación podría hacer que el jugador se plantease salir del Real Oviedo. Algo para lo que las dos partes, club y jugador, pondrán de su parte y no suceda. Pero, por si acaso, los clubes se mantienen expectantes y al acecho.