Nuevo capítulo de la vergonzosa guerra que la RFEF y LaLiga siguen teniendo a tenor de los horarios. LaLiga, aprovechando la condición de festivo del lunes 12 de octubre, había fijado para ese día la disputa de tres encuentros. El CD Lugo-RCD Mallorca; el CD Leganés-Girona FC; y por último el Real Zaragoza-Albacete Balompié.
De esta forma, la patronal de clubes lograba dispersar en varias franjas horarias, los once encuentros de la jornada. Sin embargo ahora, como ocurrió en anteriores ocasiones y a menos de 48 horas del comienzo de esa quinta jornada, la RFEF obliga a modificar los horarios de los encuentros con un señalamiento fijado para el lunes.
Un doble baremo vergonzoso de la RFEF
De esta forma estos tres encuentros deberán ser reorganizados al domingo. Es decir, a menos de 72 horas de su disputa. La RFEF sigue empeñada en perjudicar solo por fobias personales de su presidente al fútbol profesional -categorías que, por cierto- son las que permiten subsistir a dicha RFEF-.
Pero además de esto muestra un doble baremo que solo puede ser catalogado como vergonzoso, ya que la RFEF si autoriza que ese lunes 12 de octubre, festivo, se jueguen partidos de la Copa RFEF. Un despropósito mayúsculo y de difícil explicación por parte de la Federación.