Uno de los jugadores sobre los que pivotan, en el doble sentido de la palabra, la gran campaña del Valladolid Promesas es Oriol Rey (Barcelona, 25 de febrero de 1998). El centrocampista, si bien también puede actuar como central, catalán está cuajando una temporada que roza el sobresaliente. Clave para la salida de balón en el equipo de Javier Baraja, ya ha estado cerca de poder debutar en el equipo de Sergio González. Pero sus ocho -todos los que ha jugado- encuentros en el grupo I de Segunda ‘B’ le han colocado en el radar de varios equipos para este mercado invernal.
De hecho, según informó Ángel García en www.cazurreando.com el FC Cartagena es uno de los equipos que le sigue. Pero no es el único, el CD Mirandés, que busca un mediocentro que cumple con las características del barcelonés. Mediocentro formado en La Masía, salió en 2017 del FC Barcelona tras concluir su edad juvenil para enrolarse en el Leeds. El primer año fue cedido al Conquense, donde hizo su debut en Segunda ‘B’, disputando 35 partidos. Volvió al club inglés, pero rescindió para fichar en el verano de 2019 por el filial blanquivioleta hasta 2022.
Ese contrato es que el que hace que el club pucelano sea dueño de su destino. Si ambos clubes de la categoría de plata dan el paso adelante de pedir su cesión -primero deben dar salidas- en Valladolid deberán tomar una decisión. Si dejarlo salir cedido, pudiendo así sumar minutos en una categoría superior para volver a Valladolid, o retenerlo. Una decisión nada sencilla, pues puede marcar el futuro a corto plazo del Promesas, dada su importancia en el equipo de Javier Baraja.