Mikel Balenziaga es de esos tipos que van de frente. No da rodeos a la hora de expresar una idea o un sentimiento. Esto segundo es lo que expresa de forma vehemente si le preguntan por si dejará el fútbol cuando concluya su contrato recién renovado con el Athletic Club. No quiere ni oír esa palabra ni la de jubilación. “Lo de jubilarme ni hablar. Tengo claro es que me voy a jubilar yo mismo, sea aquí o en otro sitio, mientras el cuerpo aguante”, dijo el de Zumárraga.
Eso sí, no oculta que retirarse en el Athletic, sería lo mejor que podría ocurrirle, ya que eso supondría seguir a un nivel alto más años. “A todos los que hemos estado aquí muchos años, nos gustaría terminar la carrera en el Athletic. Pero mi sueño es que el cuerpo aguante y pueda estar varios años más cada día e ir a entrenar. Esa sería la mejor de las señales y me gustaría, claro está, sea aquí, pero ya se verá”, dijo.
Su renovación parecía prácticamente descartada hasta la Supercopa, donde su buen papel parece fue determinante en esa extensión de contrato por un año. Una decisión que, entre la afición genera una enorme disparidad de opiniones, pero que el jugador asume con naturalidad. “No me he sentido mal tratado, ni mucho menos. Yo siempre entreno igual, me apasiona, y cuando toca jugar a dar lo máximo en el verde y cuando no, a dar lo máximo en el banquillo y en Lezama”, soslayó Balenziaga.
En cuanto a las críticas sobre su renovación, ni las ha escuchado ni les da importancia. “Como jugador lo que valoro lo primero para renovar es tener la ilusión como para seguir ayudando al equipo, que el Athletic crea que pueda ser útil e intento no pensar más allá. Todos los días intento dar el máximo para poder estar aquí. Soy el mismo jugador que en la renovación anterior e intento hacer cada día lo de entonces. Quiero disfrutar cada día”, concluyó.