El futuro de Manu Morlanes (Zaragoza, 12 de enero de 1999) no pasa por la UD Almería. Aunque el cuadro rojiblanco estaba más que dispuesto a apostar muy fuerte por el mediocentro aragonés a futuro y convertirlo en uno de los faros sobre los que pivotar su próximo proyecto, el Villarreal se ha cruzado de lleno. Y es que el cuadro castellonense ejecutará su cláusula de recompra sobre Morlanes, cifrada en unos 4 millones de euros.
Unai Emery ha sido el máximo valedor para que desde La Cerámica se apueste fuerte por su regreso. El técnico guipuzcoano quiere verle en pretemporada tras su año en Almería donde ha jugado 39 partidos, siendo titular indiscutible, anotando un gol y dando tres asistencias. Pero sobre todo por su condición se ser el principal arquitecto del juego ofensivo de los indálicos. Éstos pierden a un jugador sobre el que construir en el futuro, pero por un solo año de cesión obtienen una ganancia de esos 4 millones de euros, logrando una operación económica brillante.
El Villarreal quiere evaluar in situ esa progresión en Segunda; categoría en la que no hay que olvidar Morlanes debutaba este pasado curso. Si convence en pretemporada, el jugador se quedará a las órdenes de Unai Emery. En caso contrato el plan groguet es buscar un traspaso por encima de esos 4 millones de euros que pagará al cuadro almeriense. En Italia varios clubes, como son el Sassuolo o la Lazio se han interesado mucho. Incluso se ha llegado a hablar de ofertas en torno a los 10 millones. No obstante, si se da una operación así, será muy avanzado el mercado.