Con el futuro de Kieran Trippier, que regresaba este pasado lunes a los entrenamientos con el Atlético de Madrid, aún en el aire, por el persistente interés del Manchester United en hacerse con sus servicios, el club rojiblanco peina el mercado desde hace tiempo por si debe lanzarse a por un lateral derecho. Si el inglés acaba saliendo, ese fichaje será obligatorio.
Porque, aunque tiene otros dos en la plantilla como son Vrsaljko y Arias, pero la continuidad de ambos se antoja más que complicada. Nadie oculta que la prioridad, de hecho, es lograr traspasarlos, aunque en el caso del cafetero se ve complicado. La prioridad es que continúe un Trippier que además no ocupará plaza de extracomunitario. Pero si en Old Trafford finalmente llegan las pretensiones económicas del Atlético, su salida tomará velocidad.
En ese caso tocaría fichar un lateral, quizá dos. Desde Italia han añadido un nuevo nombre a la agenda del Atlético. Es el Alessandro Florenzi, carrilero diestro de la Roma de 30 años de edad. José Mourinho, nuevo entrenador del cuadro capitalino, no cuenta con el internacional italiano que ha vuelto tras su cesión en el PSG y que se proclamó recientemente campeón de la Eurocopa, si bien estando más a la sombra de otro nombre relacionado con el Atlético: Di Lorenzo.
Tras encadenar varias cesiones, la última precisamente en el PSG, la Roma quiere traspasarle este verano que entra en último año de contrato. El Atlético es uno de los que se han interesado por su situación, según diversos medios del país transalpino, que también vinculan al Sevilla como posible destino del romano desde hace varios meses, ya que los hispalenses también están inmersos en la busca de un lateral derecho. Florenzi, además, conoce LaLiga Santander de su paso por el Valencia.