Brais Méndez le costó a la Real Sociedad el pasado verano algo más de 14 millones de euros y otras cantidades en variables que, acorde a su rendimiento individual y grupal, el cuadro txuri urdin tendría que abonar. Una cantidad que en el verano fue controvertida. ¿Valía ese dinero el jugador de Mos? ¿En serio la Real Sociedad se planteaba pagar esa cantidad por él? Nadie dudaba de su calidad, mostrada en el Celta e incluso en la Selección. Pero su irregularidad generaba dudas. Unas que ahora se está encargando de disipar.
Porque la realidad, a día de hoy, es que si Brais Méndez sigue jugando y aportando al nivel que lo está haciendo, su fichaje habrá sido un chollo. En 11 partidos, entre Liga y Europa League, que lleva en su nómina de disputa, suma ya 6 goles y una asistencia. Cifras más que notables para un jugador cuya mejor marca goleadora en Primera fueron 9 goles en la campaña 2020/2021. Un registro que a estas alturas ya solo tiene a tres goles con más de seis meses de competición por delante para pulverizarlo con creces.
La Selección y el Mundial… a la vuelta de la esquina
Pero más allá de cifras, su impacto en el juego y propuesta de Imanol Alguacil es tremendo. Según los datos proporcionados por Alebia, Brais Méndez interviene en más del 90% de las posesiones del cuadro txuri urdin en el último tercio de campo. Siempre presente en el terreno de juego para intentar dar más sentido a la jugada de ataque como se aprecia sin necesidad de estadísticas.
Un rendimiento que lo sitúa de nuevo en el radar de la Selección de cara al mundial de dentro de un mes. Luis Enrique fue quien le hizo debutar y su rendimiento no está pasando por alto. Máxime si jugadores como Marcos Llorente, Gerard Moreno o Dani Olmo, que si se recuperan llegarían muy justos a la cita mundialista en Oriente Medio. El de Mos se está ganando su regreso y éste gana enteros.