Fue posiblemente el partido más difícil en la carrera de Nikola Mirotic, pero la estrella del Barça salió indemne. No era sencillo. En la víspera del primer partido de la final el fuego cruzado entre el hispano-montenegrino y el club azulgrana puso al jugador en una posición delicada. El Barcelona le comunicó tras la Euroliga que iba a rescindir su contrato y Mirotic respondió el jueves a las filtraciones mostrando su malestar con el club.
Se anunciaba tormenta en el partido para Niko, y más tras ver cómo en las redes sociales alguna peña barcelonistas cargaba contra él tildándole de desagradecido, cuando es el club el que prescinde de él. Eso entendió la mayoría del público que asistió al Palau y que le recibió con mayoría de aplausos. Aun así se le vio afectado.
No anotó su primera canasta hasta el minuto 16. Y en el minuto 31 (66-64) llevaba tres canastas. Pero en el último acto, con el partido en el aire (82-77, min 36), capturó un rebote ofensivo y en esa misma jugada anotó un triple. Y cuando el Madrid apretó anotó cuatro tiros libres para cerrar el triunfo. En un día discreto, acabó con 14 puntos y 7 rebotes. Es lo que tiene ser un un grande, y el Palau se lo agradeció ovacionándole cuando Jasikevicius le sentó a 19 segundos del final. El ‘soci’ con sus aplausos declaró el ‘despido improcedente’ del club, que perdió por KO el plebiscito público.
“Estoy muy agradecido a la gente. Ellos lo saben. Para mí han sido y siguen siendo muy importantes. El Palau siempre ha acompañado, siempre ha estado para mí y para el equipo y en estos momentos se agradece mucho más ver que la gente está contigo”, comentaba el jugador hispano-montenegrino a los medios de comunicación después del primer choque.
“Dije lo que dije ayer. Para mí hoy era volver a jugar al baloncesto, disfrutar, hacer bien lo que tengo que hacer con la afición. Sabía que no iba a ser un partido fácil, pero soy profesional. Tengo que poner a un lado lo que está pasando”, respondió a las preguntas de los medios de comunicación en el vestuario.
“No me importa lo que está pasando, me interesa el club, el equipo y poder ganar este partido y para mí solo existe el partido del domingo”, continuaba, expresando su gratitud hacia el público del Palau. El recibimiento fue mayúsculo, la afición estuvo volcada con él, conscientes de que pueden ser los últimos partidos en Barcelona con la camiseta azulgrana.
El título sería la consecución perfecta para su carrera en el Barça, el objetivo final de Mirotic. “Esto no es ganar solo un partido, es de ganar el título. No por mí, sino por el club y la afición porque se trata de ellos”, concluyó el jugador tras el primer duelo de la final ante el Madrid.
@chemilinqui