Carlos Alcaraz venció remontando a Taylor Fritz este martes en el segundo partido de las ATP Finals, lo que le daba virtualmente el pase a las semifinales de este último torneo del año. Además, antes del comienzo de este evento, el español sabía que si ganaba tres partidos, recuperaría el número 1 del mundo. Y ya tiene dos en su bolsillo. Por ello, si gana a Musetti este jueves, volverá a estar en lo más alto del tenis mundial sin importar lo que haga Sinner en Turín.
Nada más vencer a Fritz en tres sets, Alcaraz se puso ante los micrófonos y se abrió ante la posibilidad de recuperar el ansiado número 1 del mundo. Pero con ciertas condiciones o matices. El español es sabedor que pensarlo mucho puede pasarle factura en este último encuentro de la fase de grupos ante Musetti. Pero el de El Palmar ya cuenta con un importante bagaje en estas condiciones.
“Obviamente, el número uno es algo muy bonito y un objetivo que tenía desde principio de año”, comentaba el español. “Pero intentamos no pensar demasiado en ello, porque puede jugarte una mala pasada. Si le das demasiada importancia, puedes entrar a los partidos con una presión extra o no gestionar bien los nervios. Estoy compitiendo con Jannick, que es muy consistente, mantiene siempre un nivel altísimo. Si al final consigo acabar número uno, sería algo muy bonito e importante, pero damos más valor a centrarnos en el torneo y en seguir jugando bien, más allá del ranking”, reconoció en rueda de prensa.
Alcaraz y los cambios en su juego
El español cayó por sorpresa en segunda ronda (su primer partido) en el Masters 1000 de París, lo que le hizo reflexionar y cambiar ciertas cosas en su juego: «Me ha ayudado mucho trabajar el revés, sobre todo en no ser tan predecible tirando siempre cruzado. Intento usarlo en momentos en los que el rival no se lo espera, porque normalmente ese golpe se juega cruzado y ahí puedo buscar mi derecha, que es donde me siento más cómodo. Es un golpe muy importante para mí. Hemos estado trabajando mucho en ello y creo que estamos dando muy buenos pasos en estos torneos».
“El saque es clave, sin ninguna duda. Es un golpe que te da mucha confianza para jugar de fondo, aunque en teoría sea independiente. Cuando tienes un buen porcentaje de primeros, todo fluye con más tranquilidad. Hoy me he enfrentado a un rival, como Fritz, que mete mucha presión al resto, y eso se nota. Hemos intentado ir mejorando durante todo el partido, y aunque fue yendo un poco mejor, es algo que tenemos que seguir puliendo en cada encuentro”, añadió sobre la confianza que está teniendo en su saque en Turín.
Estado emocional en Turín
“En un partido de tenis todo puede cambiar en cualquier momento. Cuando estás dentro de la pista, no piensas en lo que va a suceder, te centras en el presente. Si no tienes buenas sensaciones, cuesta creer que vayan a llegar, y desde fuera todo parece más fácil de lo que realmente es. Pero tanto hoy como en otros partidos he visto que si insistes y mantienes una buena actitud, al final todo mejora y acabas jugando mucho mejor. Lo del “Samu” es algo nuestro, una especie de código interno, que me ayuda a creer y a sacar mi mejor tenis», comentó.
Por último, Alcaraz habló sobre su estado de salud, el cansancio acumulado y lo que sufrió en un partido eterno con Fritz de casi tres horas. “Físicamente, ha sido un partido muy exigente, y mentalmente también. Además, hoy las condiciones eran diferentes: mucho calor, mucha humedad… y eso influye durante un partido tan largo. Recuperar cuesta, pero lo bueno es que tenemos un día de margen antes del siguiente partido. Vamos a intentar hacerlo todo perfecto, al milímetro, para llegar en las mejores condiciones al último encuentro y ayudar al equipo».
