El Maccabi Tel Aviv se impuso por 0 a 1 en el Estadio de la Cerámica ante un Villarreal plagado de suplentes y jugadores del filial. Muchos de ellos se estrenaban con el primer equipo y no dieron al final una mala imagen contra el colista del grupo A. Calleja dio descanso a muchos jugadores del primer equipo y dio la oportunidad de estrenarse a muchos canteranos. Gracias a este resultado el Maccabi consiguió llevarse su primera victoria en Europa League esta temporada.
Calleja planteó el partido pensando en el partido del domingo contra el FC Barcelona. Siete jugadores del Villarreal B en el once inicial del encuentro y hasta 8 canteranos groguets, sumando a Adrián Marín, en total sobre el campo. En cuanto al Maccabi de Jordi Cruyff realizó algunas rotaciones, no tantas como el submarino amarillo, pero sí que dio descanso algunos jugadores clave del equipo pensando también en intentar levantar el vuelo en la liga israelí donde se encuentra remontando el mal comienzo liguero que realizaron (ocupan la cuarta posición a siete puntos de líder, el Hapoel Haifa).
El ritmo de juego fue bastante lento y predecible por parte de ambos equipos durante toda la primera parte. A los jugadores del mini-submarino les costaba mover el balón con cierta rapidez y el Maccabi no era capaz de causarle peligro a la portería defendida por Mariano Barbosa. Roberto Soriano, hoy titular en un equipo repleto de jugadores sin experiencia de Europa, no tomó ese puesto de liderazgo que se supondría que tomar en el día de hoy. Por ende quitando algún disparo del equipo israelí, la mayoría tapado por los centrales, y algún disparo fuera del área de Soriano que se fue lejos de los tres palos defendidos por Rajikovic.
Ya en la segunda parte el partido se animó por completo. El submarino amarillo salió mucho más enchufado al encuentro complicándole mucho las cosas a la defensa del Maccabi. Morlanes, Chuca y Soriano empezaron a entenderse en la zona de tres cuartos y pudieron comenzar a conectar con los dos puntas Darío Póveda y MarIo Gonzalez. Fue Mario el que tuviera la ocasión más peligrosa de los primeros quince minutos de esta mitad tras un fuerte y acertado centro de Chuca al área pequeña. Pero, a pesar del dominio amarillo, fue Blackman el que desequilibrara el marcador tras realizar un gran desmarque a la espalda de los centrales y definiendo a la perfección en el mano a mano ante el Barbosa. El partido terminaría con un último arreón por parte del submarino amarillo en el que Darío Póveda y con algún que otro aviso por parte del Maccabi al contragolpe, aunque finalmente el 0 a 1 terminaría prevaleciendo en el luminoso.
De esta forma el Maccabi sumó su primera victoria en esta fase de grupos de la Europa League, además de ser capaces de meter su primer gol en esta edición, ante un Villarreal que ya había certificado su primera plaza del grupo en la anterior jornada y que el lunes conocerá quien será su rival en los dieciseisavos de final. El submarino amarillo ahora afrontará un importantísimo partido en el Estadio de la Cerámica este domingo para intentar volverse a enganchar a la lucha por los puestos de Champions League.