Eran las 16:15 horas del domingo 21 de Enero en el campo de fútbol de La Peña. En ese campo, cercano a la localidad de Colombres, capital del concejo de Ribadedeva, a escasos kilómetros de la frontera entre Asturias y Cantabria, se disputaba un encuentro de fútbol. La Asociación Deportiva Ribadedeva recibía al Nalón Club de Fútbol. Ambos conjuntos militan en la Regional Preferente asturiana y les tocaba enfrentarse este fin de semana.
El encuentro entre ambos acabó con empate a uno, pero el resultado fue lo de menos. El triste y patético protagonista de este encuentro fue lo que allí aconteció con el público y el trío arbitral. El encuentro lo dirigía el colegiado de la delegación de Gijón, Taregne Asnake Wolde. Un colegiado de raza negra que es muy conocido en el fútbol asturiano, donde lleva arbitrando muchas temporadas. Desde el minuto uno parte del público empezó a proferir graves insultos racistas por su color de piel. Pero no solo a él. Sino con sus asistentes. Uno de los cuales, era mujer: Sonia Güeva Rodríguez.
Parte de el público, que debería apoyar al Ribadedeva, desatendió esa labor. Se dedicó casi en exclusividad a una persecución racista contra el colegiado y machista contra su árbitro asistente. Expresiones como: «Negro de mierda, qué puta pena que no se te pinchó la patera, puto negro de mierda, hijo de la gran puta» ó «Te debió de joder la vista el salitre de la patera, negro de mierda, debes de pitar tan mal por la mierda de raza, puto negro» se oyeron en La Peña el pasado domingo.
Otros fueron contra Sonia Güeva: «A ver, nena, nena, espabílate de una puta vez […] Qué coño haces, vete a tu casa, subnormal, estabas mejor fregando en tu casa«. Pero incluso el segundo asistente, Aser Fernández tampoco se libró de los insultos del público hacia él mismo y hacia a su compañera: «Línea… Y la putita esa de la otra banda que viene contigo, ¿cuánto cobra? Me la voy a llevar hoy para mi casa a la muy zorra«.
Asnake Wolde fue más valiente que ninguno de aquellos cobardes espectadores, supuestamente hinchas del Ribadedeva. No suspendió el partido, aunque motivos para hacerlo no le faltaron. Lo terminó y redacto el correspondiente acta. Fue ahí donde reflejó palabra tras palabra todo lo que acontenció en el campo. Remarcó en el acta que las descalificaciones fueron constantes, a lo largo de todo el partido y en repetidas ocasiones.
Segunda semana consecutiva que el fútbol asturiano se ve empañado
Ahora la pelota está en el tejado de la Real Federación de Fútbol del Principado de Asturias. Desde las federaciones tanto nacional como autonómicas se dice que se muestran intransigentes con este tipo de actos. Los incidentes de público pueden conllevar desde multa económica al club local, hasta el cierre de su campo por varios encuentros. Será el Comité de Competición de la RFFPA quien decidirá las consecuencias de estos actos. Previsiblemente la resolución se conocerá el martes.
Todo esto sucede además una semana después de que otro acto empañase el fútbol asturiano. En un encuentro de Tercera Juvenil entre los equipos del San Juan La Carisa y el Beredi. Un futbolista del San Juan La Carisa agredió a un rival y al propio colegiado del encuentro. Ese encuentro si que fue suspendido. En este caso el pasado martes, el Juez Único de Competición sancionó al autor de la agresión con dos años poder jugar.