Aburrido sería la palabra grosera que definiría este encuentro que han disputado Espanyol y Real Madrid en Cornellá El Prat. Zidane fue atrevido y dejó en el banquillo a jugadores de primera calidad como Karim Benzema, y en la grada a Casemiro y su estrella, Cristiano Ronaldo pensando posiblemente en la gran cita de París. Pero esta jugada le salió mal al técnico francés.
En su innovadora formación optó por usar a Gareth Bale de «9» con Isco, Lucas Vázquez y Marco Asensio por detrás de él pero el galés no es un depredador del área y no disfrutó de muchas ocasiones. Zidane intentó darle mas calidad al ataque en la segunda parte con la entrada de Karim Benzema pero la «BB» sin su goleador Cristiano, quedó totalmente inservible por culpa de una zaga perica que estuvo brillante durante todo el partido.
El conjunto madridista comenzó fuerte el partido con dos ocasiones claras, la primera de Bale que se topó con un gran Diego López y la segunda de Raphael Varane que con un cabezazo el balón se marchó cerca del poste izquierdo. A partir de ahí, la estrategia de Quique Sánchez Flores era mantener una defensa férrea que se dedicase a sorprender al Real Madrid al contragolpe, todo ello liderado por un Carlos Sánchez impecable. Y le salió bien; el Espanyol empezó a llegar a la portería de Keylor Navas, y en los pies de Gerard Moreno se fraguó la primera ocasión clara para los pericos, que continuó con un gol anulado al delantero por un fuera de juego dudoso.
Poco después, la polémica seguiría pero en el área contraria, Victor Sánchez tocaría el balón con la mano tras un disparo de Gareth Bale, pero el árbitro lo interpretó como involuntario y no señaló pena máxima.
Tras el descanso y en el transcurso de los minutos, el guión seguiría igual, el Real Madrid tenía la posesión y el Espanyol aprovechaba los fallos defensivos de los merengues para salir al contragolpe. El equipo perico tuvo la mejor ocasión de la segunda parte cuando Gerard Moreno remató con la cabeza pero se topó con el costarricense que hizo una parada meritoria.
El partido parecía que estaba ya decidido en un empate cuando Gerard, el principal protagonista del partido, encendió un Cornellá que asimilaba ya el reparto de puntos. El killer perico tumbó por primera vez al Real Madrid después de 10 años sin que el Espanyol conociera la victoria ante los merengues y los tres puntos se quedaron en Cornellá.
El Real Madrid vuelve a perder un partido y el Atlético de Madrid puede distanciarse hasta los 10 puntos de diferencia en la pelea por la segunda plaza, mientras que si el Valencia vence en San Mamés podría arrebatarle al conjunto de Zidane la tercera posición. Por otra parte, el Espanyol ha conseguido una victoria importante que los aleja de los puestos de descenso.
@JHHdezzz