Como era de esperar, la mareona no ha titubeado ante la llamada del técnico Rubén Baraja y su equipo, y harán del El Molinón un fortín este sábado. Tanto jugadores como cuerpo técnico son conscientes de la importancia del partido ante el Rayo, y desde el final del partido en Huesca se han encargado de transmitir ese sentimiento a la afición rojiblanca.
Y si hay una afición que no suele fallar a las necesidades de su equipo, esa es la rojiblanca. Ayer, minutos antes de que se abriesen las taquillas a las 5 de la tarde, las colas de personas aguardando ya eran considerables. Y al terminar el día, solamente quedaban unas localidades sueltas en la tribuna oeste.
Además, a la importancia del partido se unen los actos en memoria de Quini. El club ha emitido un comunicado de prensa solicitando la ayuda de todos los aficionados, personándose en El Molinón el viernes a las 5 de la tarde en la puerta 0, para ayudar en la confección del tifo en memoria de la leyenda rojiblanca.
Será el segundo partido consecutivo que el feudo sportinguista se quede sin localidades disponibles, y el tercero en lo que va de liga. Esto, unido a que el estadio registra la media de asistencia más alta de la categoría, y la undécima más alta del fútbol español, refleja el compromiso y el apoyo que la mareona brinda al equipo.