Unicaja de Málaga daba la sorpresa esta semana ganándole al campeón de Europa, Fenerbahçe Dogus Istambul, en su casa pese a ya no tener opciones para la siguiente fase de la Euroliga. El regreso a la máxima competición europea ahora depende de acabar primeros clasificados en la Liga ACB sin contar a los equipos que cuentan con licencia A.
Los últimos resultados en la Liga en cambio no habrían sido positivos para los malagueños, habiendo perdido los últimos tres partidos, el equipo de Joan Plaza había caído hasta el octavo puesto de la clasificación general. Iberostar Tenerife, quienes compartían las mismas 14 victorias y 11 derrotas, les visitaban esta jornada. Ambos equipos se disputaban ascender un escalón en la lucha por los primeros ocho puestos de la clasificación general y comenzar a asegurar un puesto en los play-off.
En el comienzo del partido Iberostar Tenerife no se encontraba cómodo bajo aros y el triple era una puerta cerrada que solamente lograron abrir llegando el final del primer período. Unicaja en cambio nos ofrecía un inicio explosivo, su intensidad desde el minuto uno se hizo patente poniendo el marcador a su favor con un primer cuarto que acababa 24-11.
Los siguientes diez minutos fueron claramente tinerfeños, una vez abierta la cosecha de tres puntos, con un Vasileiadis muy acertado desde la línea 6,75 metros, los de Katsikaris parecían que recuperaban el espíritu defensivo que les caracteriza y obtenían firmar un cuarto a su favor de 8-20. Unicaja se encontraba atascado en su juego, sin resolver ataque y con una defensa descontrolada, todo daba a entender que se habían desconectado muy pronto del partido.
El resultado del marcador al descanso era de 32-31, lo que nos deparaba la segunda parte del partido era un misterio.
Unicaja regresó con energías renovadas y con ganas de llevarse el triunfo, jugadores que no habían estado acertados en la primera mitad marcaron una diferencia muy positiva en el tercer cuarto, Alberto Díaz, quien anotaba diez puntos en pocos minutos, sumado a la reaparición en el juego de Nemanja Nedovic, llevaban a los suyos a abrir una brecha en el marcador, 52-40. Tenerife intentaba recortar diferencias con los triples de Vasileiadis, pero el escenario del partido había cambiado, y con la ausencia de Ponitka, quien sólo jugó 9:40 minutos al comienzo del encuentro, el equipo isleño poco ofrecía para volver a optar a hacerse con el partido. Pese a todo, Unicaja volvió a sufrir un momento de desconexión y con la ayuda de Ferrán Bassas, los insulares se marcharían al último descanso 58-49, aún había partido por delante.
Para el final, Plaza confió en sus hombres titulares para amarrar el triunfo, Tenerife lo intentó hasta el final, pero la lucha en la pintura era muy disputada y el acierto exterior pareció haberse extinguido. El final del partido sería de 72-62 para los del equipo local pese a un segundo cuarto para el olvido.
Los malagueños no sólo han obtenido un partido de ventaja sobre Tenerife con el triunfo de hoy, también se hacían con el basket average. Esto hay que sumarlo a las derrotas de los contendientes directos, Morabac Andorra y Montakit Fuenlabrada, quienes habían caído en sus respectivos partidos en la jornada 26.
El balance de la jornada para Unicaja de Málaga acabaría siendo muy positivo cara a la siguiente fase de la Liga ACB, y por supuesto para optar a la cotizada plaza para la Euroliga 2018/2019.
@PatriDuarte