La temporada del Córdoba CF va a ser para el recuerdo para muchos aficionados del fútbol de plata. Las desgracias llegaban una tras otra en la primera vuelta y hundían a un grande de esta categoría. La llegada de distintas personas en distintos estamentos del club blanquiverde hicieron que la situación variase y, tras cinco meses y medio, han conseguido sacar de esta situación al equipo con una gran gesta.
Un nuevo presidente de la tierra y cordobesista
La llegada de Jesús León como nuevo dueño y presidente del Córdoba CF era algo que llevaba esperando y necesitando la afición desde hace mucho tiempo. Su inversión pasaba primero por comprar el club y, con él, llegaría otra persona muy importante para reconstruir la plantilla, Luis Oliver, sin mucho margen de maniobra.
Su política fue la de acercar el club a cualquier sector de la ciudad y poner cualquier facilidad a su alcance para rodear a los jugadores en todos los partidos. Buses gratis para los partidos fuera de casa, entradas casi regaladas e introducir a asociaciones de aficionados excluidas por González fueron algunos de sus movimientos, los cuales han hecho ganarse el respeto y el cariño de la afición.
Un entrenador con una plantilla guerrera y valiente
Tras asumir que Jorge Romero no iba a poder conseguir la salvación, el nuevo director deportivo decidió hacer una última inversión en un entrenador con experiencia en gestas históricas. Previamente, la llegada de media plantilla nueva reforzaría todos los sectores del campo, salvo la portería, destacando nombres de primera como Aythami, Juanjo Narváez o José Antonio Reyes.
José Ramón Sandoval sabía que no solo era saber utilizar las características de su plantilla, sino que tenía que motivarla semana tras semana, partido a partido, para que no cayeran en el bucle pesimista en el que llevaban ya meses. Es por ello que se implicó en el factor anímico fundamentalmente y a raíz de ahí sacó distintos sistemas para cada partido, algo que le haría tildar a los suyos posteriormente como «un equipo camaleónico«.
Todo esto ha llevado a que el Córdoba CF se sitúe en las últimas 15 jornadas, las que lleva el técnico en el banquillo, como el cuarto mejor equipo de LaLiga 1|2|3. Las nueve victorias, dos empates y cuatro derrotas que se han cosechado han dado al equipo una remontada de hasta treces puntos de diferencia, quedando en la 16ª plaza de la clasificación a falta de una jornada y con un punto de distancia respecto al descenso.
Después de 31 jornadas, la alegría y esperanza por la salvación están más vivas que nunca en tierras califales. Una gesta que puede ser histórica necesita ser certificada este fin de semana en el Nuevo Arcángel, por lo que la afición no volverá a fallar y llenará un estadio que quiere gritar a los cuatro vientos que «Si se puede«.