Quedan noventa minutos en El Molinón. Noventa minutos en los que el Real Valladolid buscará aguantar y el Real Sporting de Gijón remontar. El gol de Jony el jueves en el Nuevo José Zorrilla ha dado mucha vida al cuadro gijonés que prepara junto con su afición el ambiente propicio de una gran noche para intentar obrar la remontada. Eso es lo que debe lograr el cuadro pucelano: sobrevivir a El Molinón.
Por una parte, el Real Valladolid llega muy fuerte a este play-off, con una recta final de liga muy fuerte. Desde la destitución de Luís César y la llegada de Sergio González, el equipo ha resurgido de sus cenizas. Todo hay que decirlo, en el primer encuentro del nuevo entrenador, el equipo gijonés cosechó una sufrida victoria en el Nuevo José Zorrilla. Desde entonces, el equipo pucelano ha sumado 6 victorias, un empate y una derrota. En cambio, el Real Sporting transmite peores sensaciones de cara a este play-off. El equipo de Rubén Baraja llega muy justo a esta recta final. 4 derrotas en los últimos 5 partidos, que contrastan con la racha anterior de 12 partidos seguidos sin conocer la derrota, con 10 victorias.
Repasando los enfrentamientos entre ambos conjuntos a lo largo de esta temporada, el balance está muy equilibrado. Sólo una pequeña inclinación hacia el lado rojiblanco. En la ida, un 1-1 en El Molinón – Enrique Castro “Quini” que se pudo decantar para ambos lados. Un resultado que la daría el pase al cuadro pucelano. Pero ninguno de los dos equipos se parece en nada a como llegaron a aquel partido de Noviembre.
Pudimos ver un Valladolid que dejó muchos huecos a la espalda de la defensa, con tres centrales que hicieron aguas en numerosas ocasiones, pero que los delanteros rojiblancos no supieron aprovechar. En el otro área, el equipo vallisoletano demostró su poderío aéreo. En un córner llegó el empate, y tuvo varios para llevarse el partido.
Respecto al partido de vuelta, el Sporting logró un 0-1 en Zorrilla que le mantenía en el liderato con un gol muy tempranero. A base de saber sufrir, y achicar balones aéreos, el equipo rojiblanco consiguió sacar una luchada victoria del feudo pucelano.
De cara a la estadística, ambos equipos llegan también muy parejos. Los dos son equipos fuertes en casa. 14 victorias y 4 derrotas del conjunto pucelano, por 15 victorias y 3 derrotas de los gijoneses. En cuanto a los partidos fuera de casa, 5 victorias y 9 derrotas vallisoletanas, por 6 victorias y 10 derrotas sportinguistas. Lo que deja claro, que cada equipo se tiene que hacer fuerte en su casa, ante su afición, y rascar fuera lo posible.
Si destacamos a un jugador en ambos partidos, el nombre propio sería el de Diego Mariño. El portero gallego del Real Sporting salvó a su equipo en ambos partidos con varias estiradas espectaculares, de esas que dan puntos y en este caso, pueden dar eliminatorias. Aún así, no nos podemos olvidar de jugadores como Jaime Mata, Michael Santos, Pablo Hervías o Jony, que ya han demostrado lo que valen en esta eliminatoria.
Real Valladolid
El equipo vallisoletano acudirá a El Molinón en busca de sentenciar la eliminatoria. Lo hará, en palabras de Sergio González: «sin especular y yendo a ganar». Tendrán que sobrevivir a un Sporting que se antoja diferente al que se vio el jueves en el José Zorilla. El cuadro rojiblanco ha ganado once de los doce partidos que ha disputado en su feudo. Pero el cuadro pucelano sabe que perder por la mínima le es suficiente para avanzar a la final del play-off. Recuperará además Sergio a Míchel Herrero, que no estuvo disponible en la ida. Comandará el mediocampo blanquivioleta junto con Borja, siendo esa la única modificación en el once.
Sergio González quiere que su equipo siga siendo fiel así mismo. «Vamos a afrontar el partido exactamente de la misma manera que lo hemos hecho desde que llegamos y que nos ha venido tan bien. Si ellos salen fuerte nosotros deberemos hacerlo también. Se vivirá un gran ambiente, pero llevamos muchos partidos jugando finales y esta es una más». No le preocupa lo más mínimo ese gol de Jony que confiere más opciones al Sporting. «Cada uno se agarra a lo que quiere. Yo me agarro a que estamos en nuestro mejor momento. Les dije a los jugadores que no dejaran que nada ni nadie empañara el partidazo que hicieron».
Real Sporting de Gijón
El Sporting realizó un mal partido en tierras castellanas. Pero logró marcar y quedan noventa minutos en su casa. Noventa minutos en los que con la ayuda de un Molinón, que si bien no se llenará registrará un ambiente espectacular. Son conscientes en el seno de la plantilla que la remontada no será fácil, pero bajo el abrigo de su estadio y su afición es perfectamente realizable.
Rubén Baraja, que ya podrá sentarse en el banquillo una vez cumplida su sanción, recupera efectivos. Podrá contar con Álex Pérez, que formará pareja con Fede Barba en el centro de la defensa. También estará disponible Nano Mesa. El delantero canario se ha entrenado sin problemas y entrará en la citación e incluso podría hacerlo en el once. Su concurso como titular es la principal duda que el técnico vallisoletano tiene. Solo Guitián permanece aún de baja.
Baraja sabe que en este encuentro de vuelta tendrán que mejorar su imagen con respecto a la ida. Quiere el técnico que su equipo se parezca al de la segunda parte. «Me quedo con la segunda parte, sabemos que tendremos que jugar al límite, pero será en El Molinón y eso es un plus favorable». Sabe el técnico que este último mes ha empañado mucho su imagen, llegando a estar muy cuestionado por la afición. «Entiendo que me critiquen, pero el domingo tenemos que estar todos juntos. Estamos a dos goles de una final. […] No me voy a rendir. Pienso que tenemos opciones en El Molinón, que podemos remontar, que tenemos vida. Somos capaces».