Primera parte discreta en La Rosaleda. Arrancó con fuerza el Málaga. Fútbol control en el campo del Alcorcón, buscando profundidad por las bandas. La posesión era de los locales que insistian en buscar esa profundidad por bandas. Además del control del juego, se veía a los blanquiazules con hambre, presionando cada salida del balón de un conjunto alfarero que pasaba apuros.
Consiguieron en el 11′ enlazar una jugada los amarillos pero Pereira estaba en fuera de juego. La réplica no se hizo esperar y Recio la envió fuera. Si llega a entrar más de medio gol llevaría la rubrica de Harper. El canterano disputó hasta el final la pelota con Bellvís, la acabó recuperando y metió un gran centro para la llegada en segunda línea del mediocentro.
Con el paso de los minutos se equilibró un poco la balanza y ambos equipos tenían llegadas al área rival buscandoa abrir la lata de los goles. Lo buscó Pereira en el 24′. Filtró el balón por dentro Sangalli, el delantero tenía espacios, no vio clara la pared con su compañero y soltó un derechazo abajo, sin demasiada colocación. Paró Munir.
Cumplida la media hora en La Rosaleda, aún con la mejora del Alcorcón, el ritmo del partido bajó notablemente. Si en el primer tramo el equipo de Parralo apenas daba tres pases en campo contrario, comenzó a tener ocasiones y a incorporarse al ataque Laure o Bellvis.
En el 34′, mano clara de Pereira dentro del área. No engañó a Pulido Santana. La acción, por cierto, había concluido tras disparo del delantero contra el cuerpo de Pau Torres. No le estaba gustando a Muñiz lo que estaba viendo con el paso de los minutos y mancó calentar a Ontiveros, el único cambio en el once con respecto a la primera jornada contra el Lugo.
En el 42′ a punto esstuvo de marcar Adrián. Bellvís rompió el fuera de juego, le quedó el balón muerto al ‘8’ dentro del área, empaló la volea abajo obligando a Jiménez a estirarse para blocar la pelota. La última de la primera mitad fue para el Málaga con un lanzamiento de falta. Disparo potente de Recio, pero la buena colocación del guardameta alfarero evitó el tanto del Málaga. 0-0 al descanso.
N’Diaye arrancó en la segunda mitad con potencia y rompió a tres, abrió a la banda, se incorporó al remate, pero el balón lo despejó la defensa del Alcorcón. La dinámica al inicio de la segunda mitad era el mismo que en la primera. Sin un dominador claro y con ambos equipos intentando llegar a portería.
En el 52′ estuvo lento Sangalli. Error de Munir, recuperó Toribio, metió el pase hacia Sangalli, que no se atrevió a buscar el disparo, se le echó encima el defensor y tuvo que recular. La jugada acabó en disparo de Pereira, manso tras rebotar en Luis Hernández.
Poco después no vio anda Pulido Santana cuando centró Jdesde el costado izquierdo de Ricca buscando a Renato, que se encuentrró con un rápido Bellvís. Clamó la grada un posible penalti sobre el interior, que cayó sin que hubiese falta en el contacto. La volvió a tener Renato con un disparo potente sin demasiado ángulo para ajustar. En el 56′ se la jugó Dorca. Perdió un balón tras arriesgar en exceso en el centro del campo, agarró a Harper y le cargó para que no pudiese progresar y este pecó de juventud y no se echó al suelo aún con la cartulina amarilla que tenía el del Alcorcón.
Ambos equipos rondaban el área, pero sin ocasiones excesivamente claras. Se resistía el gol. En el 63′. Hicham hizo lo que quiso con Bellvís en banda derecha, metió el centro y el recién incorporado Gustavo Blanco disparó a las manos de un Dani Jiménez desbordado en los últimos minutos.
Con el paso de los minutos se notaba el cansancio y el partido se volvió más bronco. En ese contexto se notaba la frescura de Hicham que generaba mucho pelibro para los blanquiazules. Bajó un poco el ritmo el encuentro aunque ninguno de los dos equipos le perdieron la cara a la portería.
En el tramo final del partido el equipo de Muñiz se vino arriba gracias a los cambios y obtuvo premio. Recogió un rechace Ontiveros dentro del área, no se atrevió a disparar, se escoró hacia fuera, metió el centro entre tres defensas y Gustavo Blanco giró el cuello como un ‘killer’ y metió el balón en la red.
No se conformó el conjunto andaluz que continuó con hambre y poco después la tuvo Hicham. El canterano estaba hiperactivo ante su afición y no se quería ir de La Rosaleda sin su gol. Al igual que un Recio que seguía poniendo balones soberbios. Ambos equipos acabaron el partido con 10 tras la expulsión por roja directa de Ontivero y la segunda amarilla de Bellvis.
6 de 6 para los hombres de Muñiz que, sin desplegar un fútbol brillante, se muestran efectivos y se colocan lideres de LaLiga 1|2|3. Por su parte el Alcorcón vuelve a llevarse un jarro de agua fría en los compases finales y sigue sin vencer.