El Villarreal B logró la primera victoria de la temporada ante un combativo CD Alcoyano (2-0). Los amarillos se embolsaron una merecida y ansiada victoria en el Mini Estadi.
El conjunto de Miguel Álvarez consiguió sumar los tres puntos, pero para lograrlo tuvo que exhibir autoridad y solidez ante un rival que no aterrizó en el feudo ‘groguet’ con ninguna intención de especular. Desde los primeros compases, los blanquiazules presionaban arriba, buscando aprovechar algún desajuste en la salida de balón amarilla.
Más allá de algún susto puntual, los jóvenes pupilos de Miguel Álvarez, con el paso de los minutos, superaron la línea de presión rival y empezaron a tener protagonismo en campo contrario. Un disparo al poste de Simón Moreno tras una magnífica acción individual de Iván Martín se convirtió en la ocasión más clara de una primera mitad.
En la segunda mitad, el Villarreal empezó a generar peligro al espacio. El Alcoyano, que había frenado el potencial ofensivo del Mini Submarino a base de pequeñas interrupciones, empezó a verse superado ante los rápidos contragolpes que montaban los amarillos.
En el 51’, el Alcoyano contó con una clara ocasión de ponerse por delante. Sin embargo, un providencial Joan Femenías tapó con solvencia un potente disparo a bocajarro. Inmediatamente después, los amarillos armaron el contragolpe. Samu sirvió un balón al espacio a Franquesa, que volvió a demostrar que está en estado de gracia al anotar el primer tanto del encuentro.
Tras el gol, el CD Alcoyano adelantó líneas y trató de someter a los ‘groguets’ con balones al área y acciones a balón parado. Los amarillos buscaron con velocidad la portería defendida por Bañuz. En el 78’, Pedro puso el balón al espacio para Samu, que tras una vertiginosa conducción, habilitó a Rubén Mesa para que marcara a placer el segundo tanto del choque.
Pedro y Samu tuvieron el tercer gol en sus botas. A poco del final, Mario González completó su vuelta a los terrenos de juego tras más de dos meses fuera por lesión. Finalmente, el Submarino se adjudicó una importante victoria que refrenda las sensaciones de los últimos encuentros.