Los tres puntos volvieron a quedarse una semana más en Santo Domingo, y con 14 puntos, el Alcorcón se sitúa en cuarta posición empatado a puntos con el segundo, el Granada. Fue un partido en el que el conjunto alfarero supo aprovechar muy bien sus ocasiones y ofreció un juego táctico formidable que no permitió sentirse cómodo en ningún momento al Oviedo.
El partido comenzó con un Oviedo muy serio y seguro buscando las botas de Saúl Berjón y sobre todo de Joselu para tratar de adelantarse en el marcador. Estos dos fueron quienes tuvieron en sus botas las mejores ocasiones para su equipo, aunque sin gran fortuna ni excesivo peligro.
A partir de los 15 primeros minutos de partido, el encuentro se comenzó a equilibrar y el conjunto alfarero desperdició una muy peligrosa ocasión. Juan Muñoz se plantó en un mano a mano ante Alfonso Herrero, que finalmente definió una pobre vaselina muy fácil para el guardameta. Pero tanto va el cántaro a la fuente que, tras un perfecto pase entre líneas, Dorca definió con un derechazo imparable rozando el larguero que dejó de piedra al guardameta carbayon.
El gol en contra sirvió de impulso para que el Oviedo volviese al ataque y a buscar su fútbol. Sin embargo, el Alcorcón estaba muy bien plantando en el terreno de juego y consiguió abortar una tras otra las intenciones de ataque.
“Trepidante” es el adjetivo que definió al comienzo de la segunda parte. El Oviedo salió más despierto que nunca y Dani Jiménez evitó tres remates peligrosísimos seguidos. Primero fue Saúl Berjón con una falta despejada tras la estirada del guardameta alfarero, después Bolaño remató un córner que volvió a despejar Dani Jiménez y, finalmente, Mossa mando fuera otro córner más.
El Alcorcón no quería que se le escapara este partido y, casi sin querer, en una falta estúpida en la frontal del área a Jonathan Pereria, Juan Muñoz ajustó un exquisito golpeo hacia la escuadra derecha, que entró después de rebotar en el larguero.
Con un resultado de 0-2 en contra, el Oviedo no tenía nada que perder, así que decidió apostar todas sus fichas. Era un todo o nada y los diez jugadores de campo estaban todos en la mitad de campo alfarera en busca del milagro.
Se encaraba la recta final del encuentro y las ocasiones del Oviedo comenzaban a ser cada vez más peligrosas. Incluso fue anulado un gol por fuera de juego al conjunto carbayon que seguía sin ver puerta.
Finalmente, el partido llegó a su fin con un Oviedo que no estuvo a la altura del encuentro, mientras que el Alcorcón sigue su paso imparable hacia los puestos de ascenso y sacando cada vez mayor diferencia al descenso.