El héroe del Sporting en la eliminatoria de ayer en el Wanda Metropolitano en la Copa del Rey tiene nombre: Daniel Martín Fernández.
Nadie discute que en el fútbol los méritos son colectivos, pues los equipos los forman once jugadores. Pero el protagonista de esta historia, en el que seguramente fue su mejor día como profesional, él, hijo de un futbolista con una dilatada trayectoria en Segunda ‘B’, se fue a celebrar el pase con su hermana pequeña Olaya. Porque Dani sabe que para llegar a lo de ayer ha tenido que trabajar muchísimo. Y ahí quien siempre estuvo fue su familia.
Dani se plantó ayer, bajo una intensa lluvia, en un estadio que acogerá la final de la UEFA Champions League en siete meses. Tras ciento veinte minutos, llegó a una tanda de penaltis. Y con veinte años logró detener dos -y no fueron tres de milagro- lanzamientos para dar el pase a tu equipo. Bien merece la gesta el calificativo de héroe de la eliminatoria. O el MVP que dirían en las ligas norteamericanas.
El heredero del «Gatu»
Dani es, desde hace años, una no solo de las más firmes promesas de la cantera rojiblanca, sino también de España con quien es internacional en categorías inferiores desde la categoría sub-16. Una cantera rojiblanca que ansía poder volver a tener un gran portero formado en su cantera. Algo que la afición ansía desde la retirada del mito Juan Carlos Ablanedo. Porque sí, después del «Gatu» hubo otros como Juanjo o Sergio Sánchez que, formados en la Escuela de Fútbol de Mareo, llegaron a disputar muchos partidos con el primer equipo. Pero nadie osaría compararlos con el «Gatu».
Dani es uno de los mayores talentos de la generación del 98. Junto con otros como Nacho Mendez o Pedro Diaz. No hacía falta la performance de ayer en Copa para saber que es el portero con más futuro de la cantera rojiblanca desde Ablanedo. Todo buen aficionado al Sporting sabe de su calidad, sus características. Porque el de ayer no era su debut. No se presentó ayer ante el gran público, o al menos, ante el público sportinguista.
Eso lo hizo hace trece meses, también en una eliminatoria de Copa del Rey frente al Numancia. Y aquel debut sí que fue a lo grande. Detuvo otros dos penaltis, uno durante el partido y otro más en la tanda final contra los sorianos. Pero le faltó la guinda. La de poder superar la ronda. Eso lo logró este año. Y lo podrá seguir haciendo, ya que gracias a avanzar de ronda, podrá seguir defendiendo la portería rojiblanca en, al menos, dos partidos más.
A la sombra de Diego Mariño
Porque otro aspecto a considerar es su crecimiento año a año que le hace mejor. Un crecimiento que le ha llevado a ser convocado esta pasada semana con la sub-21 de Luis de la Fuente, aunque no pudo llegar a debutar. Un crecimiento que le ha llegado a plantarle cara al que nadie discute es el portero titular del cuadro rojiblanco como Diego Mariño.
Este verano pasado se presentaba una batalla interesante. Por un lado el guardameta vigués. Mariño llegaba con el aval de su pasada temporada. Por otro lado Dani. La gran promesa, que venía de cumplir su ciclo en el filial con dos temporadas jugándolo prácticamente todo y con la carta de presentación en aquella eliminatoria de Copa. Pero no hubo batalla, pues Dani cayó lesionado en pretemporada. Se fracturó un dedo, una lesión importante para un portero. Posiblemente el ganador de tal batalla por el puesto de titular de haber habido hubiese sido Mariño. Pero la mala fortuna del gijonés nos privó de verlo.
Y para acabar. No se olviden de este nombre: Christian Joel Sánchez Leal. Porque el Sporting tiene portería para muchos años. Es, posiblemente, lo único seguro que el aficionado rojiblanco puede saber sobre su equipo en el futuro.