El derbi almeriense tiene color rojiblanco

Retornaba el derbi almeriense a la competición oficial tras una larga espera. No era un duelo entre los dos primeros equipos de la UD Almería y el CD El Ejido 2012, sino que por parte del club almeriense era el filial quien se mediría a los celestes. Un partido especial para Daría Guti al jugar ante su antiguo equipo, y para Navas, ejidense de nacimiento pero jugando en el filial indálico. Ambos conjuntos contaban con el apoyo de sus seguidores, algo más de un centenar en el bando celeste, colocados en Preferencia, mientras por parte local se veía más ambiente que en los partidos precedentes, contando con la presencia de Grada Joven.

Esteban Navarro no podía contar para la cita con Damián, después de que este fuese expulsado en Ibiza, su lugar lo ocupaba Urri, si bien lo hacía de central y Javi Pérez pasaba al lateral izquierdo. También se caía del once Lin para que jugase en su demarcación Sergio Pérez, y el técnico mojonero introducía a Darío Guti para jugar con dos delanteros, relegando a Dani Albiar al banquillo.

Por parte celeste, Alberto González recuperaba al meta Aulestia tras cumplir su encuentro de sanción por la expulsión. Pero también tenía que hacer cambios en el once por lesión, casos de Sergio Jiménez y Molo, el puesto del central lo ocupaba Garrido, mientras que del centrocampista lo ocupaba Álex Sánchez. También perdía la titularidad Pino, ocupando su sitio Jordan Sebban al cambiar el sistema de juego.

Los dos equipos se mostraban sumamente agresivos, con duras entradas desde los primeros compases del partido. El conjunto visitante llegaba con más asiduidad que su rival, pero la ocasión más clara hasta entonces había sido para los rojiblancos con un centro-chut de Javi Pérez que se estrellaba en el larguero. En el 22′ los ejidenses gozaban de un saque de esquina después de que Samu Corral cuando casi se encontraba solo ante Batalla y se disponía a rematar, se topase con un defensor que despejaba el esférico.

Estábamos ante un intenso choque, pero no fue hasta casi el minuto 25, cuando el colegiado mostrase la primera cartulina de la contienda, viéndola esta Garrido tras una entrada. En el 27′ tenía que intervenir Albert Batalla para mandar a córner un lanzamiento raso de Emilio Cubo que iba muy ajustado.

Se animaba también el conjunto unionista que no pretendía ser menos que su rival. Tan intenso estaba siendo el choque, que cuando restaban 12 minutos para el descanso, Albert Batalla tenía que ser atendido por las asistencias médicas tras un choque con un adversario, cuando el guardameta catalán se lanzaba con todo para evitar el remate del futbolista celeste.

En el 39′ Batalla tuvo que estirarse una vez más tras un lanzamiento de falta de Tomás escorado en el costado derecho, que parecía ir sin peligro, pero después de no despejar nadie inquietó al arquero, teniendo que meter la mano. Sin que se moviera el marcador durante los primeros 45 minutos y los tres de prolongación, los 22 protagonistas ponían rumbo a vestuarios tras un primer tiempo cargado de intensidad.

Alberto González introducía un doble cambio a la vuelta de vestuarios, se quedaban en el banquillo Velasco y Alfonso, saltando al verde Carralero y Pino. Este segundo periodo se iniciaba sin un claro dominador y con llegadas de ambos equipos.

Cuando llegábamos a la hora de juego, Darío Guti adelantaba a los rojiblancos en el marcador tras recibir  la bola en la frontal del área, irse de un defensor y cuando le salía Aulestia la ajustaba al costado derecho de la meta celeste. Un exjugador celeste inauguraba el electrónico del Mediterráneo. Apenas cinco minutos más tarde, los rojiblancos aumentaban la diferencia con un tanto de cabeza de Toril que remataba un centro procedente desde carril izquierdo de Javi Moreno.

Los visitantes no cambiaban su estilo de juego, a pesar de verse por detrás en el marcador. No obstante, el resultado daba confianza a los unionistas, que estaban rompiendo una racha de casi dos meses sin vencer. Algo que no hacían desde el pasado 28 de octubre, cuando se imponían 1-0 al Atlético Malagueño en el Anexo.

Tardaba Esteban Navarro en realizar la primera sustitución en las filas rojiblancas, no fue hasta el minuto 81 cuando pisaba la hierba del Estadio de los Juegos Mediterráneos Lin, quien entraba por Toril. Cuando restaban cuatro minutos para la conclusión del derbi, Carralero acortaba distancias tras chutar sin oposición, pero su tanto era anulado por posición antirreglamentaria.

Esperaba hasta los últimos momentos el técnico local para agotar los cambios. En el 89′ daba entrada a Youness por Urri, y justo en la siguiente jugada retiraba del terreno de juego a Callejón para que entrase en el campo Dani Albiar.

Llevábamos dos minutos de la prolongación, cuando Carralero volvía a notar y su gol volvía a ser anulado por fuera de juego. Sin tiempo para más, tras cuatro minutos de descuento, Orellana Cid señalaba el final del derbi almeriense. Un derbi almeriense que tenía color rojiblanco, con un filial que se reencontraba con la victoria casi dos meses después, imponiéndose a su máximo rival.