Desde el primer minuto los locales acosaron a un Rayo que no sabía como desquitarse. Presión asfixiante de los rojijos que hacía que los madrileños no tuviesen ninguna posesión larga. Aún así los navarros no conseguían inquietar la meta de Cantero. La primera ocasión fue para el Rayo en un contraataque bien llevado por Dani Romera que culmina Héctor. Sólo la intervención magistral de Herrera impidió que se adelantase el cuadro visitante.
A raíz del susto, los rojillos despertaron. Primero un contrataque bien llevado en el que Juan Villar erró en el último pase y después un fuera de juego de Rubén García cuando se quedaba solo ante el portero fueron los primeros avisos. Aún así el Rayo no se empequeñeció y empezó a coger el timón del partido. De esta forma, Dani Romera consiguió batir a Herrera en el 35′ aunque su gol fue anulado por fuera de juego.
En el 40′ llegaría la contestación por medio de Juan Villar. El pichichi rojillo cazó un rechace en el área tras un cúmulo de despropósitos y anotó el 1-0 con el que se llegaría al descanso. Antes del pitido, ambos equipos tuvieron la oportunidad de modificar el marcador, pero dos intervenciones estelares de los porteros hicieron que el luminoso no se moviese.
Salió animado el Rayo en la segunda mitad pese al mazado antes del descanso y dos llegadas en 5 minutos inquietaron a Herrera. En el 52 llegó el primer aviso pamplonica de la segunda mitad. Torres en el pico del área, recorte de tacón incluido, que finalizó con un disparo con la zurda que se fue cerca de la escuadra. Ya en el 63, un disparo lejano de Unai García significaría el 2-0. El disparo del central rebotó en el larguero y el balón se coló en la portería madrileña. A partir de ahí, el equipo local fue amo y señor del partido. Brandon tuvo el 3-0 en una primera ocasión en el 68 pero en el mano a mano su disparo se estrelló en Cantero. Dos minutos más tarde, consiguió convertir el 3-0.
Aunque hubo ocasiones para el 4-0, y un gol anulado a Brandom por fuera de juego, el partido acabó al ritmo que marcó Osasuna. De esta forma los rojillos salen más líderes mientras que el Rayo empieza a coquetear con el descenso de nuevo.