Partido muy importante a la par de interesante le que enfrentó al Oviedo con el Deportivo de la Coruña. Un empate que ayuda a ambos, sin dejarles conforme, gracias a los pinchazos de los rivales cercanos. De los once primeros clasificados, solamente logró los 3 puntos Osasuna (y Cádiz contra el Reus).
Un día en el que volvía Carlos Fernández, un futbolista que ha mostrado ser clave en las estadísticas de los gallegos. Se adelantarían los locales gracias a un gol de Bárcenas tras un desajuste defensivo. Aunque el sevillano estaba empezando a conectar con Quique González.
El vallisoletano notaba la falta de su mejor compañero del ataque. Quizás por eso, hacía tiempo que no se le veía jugar tan bien y tan a gusto. Sin duda, ha sido el futbolista blanquiazul más participativo y el que más oportunidades ha creado.
Es cierto que el juego del equipo no fue lo suficientemente fluido y que por ello no se ha logrado crear demasiado peligro en la portería rival. Aun así, de una jugada que parecía lejana, un gran pase de Carlos Fernández lo transformaría Quique González en el empate a uno. El delantero marcaba así su decimocuarto gol de la temporada.
La situación del Dépor no es la que más agrada a su afición. La realidad es que lleva dos meses sin ganar (10 de febrero en Granada), sin contar el encuentro no disputado frente al Reus. Pero entre tanto nublado y tantas dudas, la buena noticia de la vuelta de la dupla Carlos-Quique puede sacar un rayo de esperanza.