Una historia de la que nada se supo el pasado verano. Como un jugador que acabó fichando por el Real Oviedo pudo acabar antes en el Sporting, pero no ocurrió. Todo derivado de una aparente e inocente consulta médica que no solo no terminó de convencer, sino que hizo al Sporting descartar el fichaje del jugador navarro Carlos Martínez. Un fichaje que sí hizo el cuadro carbayón.
Para ello hay que remontarse al pasado mercado de verano. Sporting y Oviedo buscaban, al menos uno, lateral derecho en el mercado. Ambos pusieron sus miras en Carlos Martínez. Un lateral diestro con un marcado carácter ofensivo a lo largo de toda su carrera. Pero, al menos eso parecía en el Sporting, había dudas de su estado físico. Y es que a sus 32 años, el navarro venía de apenas jugar 40 partidos en las últimas cuatro temporadas. Las lesiones se habían cebado con un jugador estandarte en la Real Sociedad los últimos años y que iba a abandonar la entidad al finalizar contrato.
Y es que recientemente, Javier Barrera, uno de los galenos de los servicios médicos del cuadro donostiarra, desveló en una ponencia esta intrahistoria que nadie o muy pocos sabían. Y es que Real Sporting y Real Oviedo compitieron, seguramente sin saberlo, por el mismo jugador. Así, el galeno encargado de la buena salud de la plantilla txuriurdin desveló parte de una conversación que mantuvo con otro integrante de la entidad gijonesa.
El médico desveló que antes de que la temporada finalizase, recibió una llamada de un colega médico del Sporting preguntando por Carlos Martínez. No le dio mucha importancia en un principio, porque estas consultas entre colegas médicos de clubes son habituales y entendió que se trataba de un pequeño sondeo porque estarían interesados en su fichaje. Lo que les dijo era que en las últimas temporadas las lesiones habían mermado mucho su rendimiento y que necesitaría un plan de trabajo específico y con mucho seguimiento para que recuperase su mejor nivel.
Lo cierto es que a principios de Julio se oficializó su fichaje por el Real Oviedo por dos temporadas. Nadie salvo la dirección deportiva rojiblanca sabrá hasta qué punto esta conversación influyó en la decisión o no de firmar al de Lodosa. Pero, parece adecuado pensar que disuadió al club rojiblanco, lo que le abrió de par en par las puertas del equipo de la capital del Principado.