La selección argentina se topó nuevamente con su realidad y este fin de semana tuvo un gris debut en la Copa América perdiendo ante Colombia.
La escuadra dirigida por Lionel Scaloni sufrió una dura derrota que volvió a generar una ola de críticas.
El equipo argentino mostró sus limitaciones y carencias, sumándole un técnico que no tiene lo suficiente para dirigir a una de las selecciones más importantes del continente.
Pero esto no es culpa de los jugadores o del mismo Scaloni, esto es culpa de una Federación que intentó generar un proyecto a largo plazo en una estructura de papel.
Colombia aún con el cambio de técnico es una selección trabajada, que sabe a lo que juega, que ya tiene un rumbo trazado.
En Argentina quisieron hacer un cambio generacional, quitando a varios y probando a jóvenes, en lugar de un proceso que fuera integrando poco a poco a la nueva generación.
En Argentina no hay proyecto, las decisiones se toman a la brava, siendo influenciadas por la prensa, por la afición y directivos, en lugar de tomar decisiones a conciencia.
La Albiceleste evidentemente pasará de ronda en la Copa América y luego vendrán partidos a matar o morir, donde una individualidad o un golpe de suerte te puede llevar hasta la final.
Pero está clarísimo que el equipo no tiene un rumbo y con Scaloni no van a llegar a ningún lado. Están desaprovechando al mejor de la historia, que hace lo que se puede, pero cuando es él y Lo Celso contra los demás, pues no hay manera de que algo salga bien.
Talento y jugadores hay, pero necesitan un orden desde lo directivo hasta lo deportivo. Scaloni no puede ser su entrenador para Qatar 2022, Argentina necesita un técnico con personalidad y con las bases suficientes para poder dirigir a esta selección.
A esta equipo ya no le sirve llegar a otra final, si Scaloni quiere seguir en el banquillo necesitan ganar la Copa América, cosa que se ve muy complicado después de las buenas actuaciones de Brasil, Colombia y Uruguay.
En el tema de los jugadores, hay muchos que no merecen vestir la Albiceleste, Di Maria fue un fantasma en todo el primer tiempo ante la escuadra cafetalera, no corrió, no la pidió, no hizo nada.
A esta selección le hace falta hambre, muchos no sudan la camiseta, no se matan en la cancha, son como fantasmas en el campo. Entiendo que vienen de fracaso tras fracaso, pero hay que levantarse.
Argentina no puede seguir esperando que Messi resuelva todo como hace más de un año, que se cargó al equipo en los hombros para clasificarlos al mundial.
Esta selección necesita volver a ser un equipo y a jugar como equipo, pero con Scaloni no creo que sea posible.
Twitter: @ismagonzalezMX