Mañana fría en el Ciudad de Tudela en la que el CD Tudelano recibía a la Real Sociedad B en un duelo en el que ambos equipos necesitaban puntuar como mínimo, pese a tener distintas necesidades, los locales la de evitar entrar en puestos de descenso y los visitantes para mantenerse en los de promoción. Blanquinegros y, hoy verdes, se medían en un choque que se caracterizó por la falta de ritmo y el conformismo.
Rodaba el balón sobre el verde y eran los tudelanos los que mandaban durante los primeros compases de juego. Lo intentaba Soto en el minuto 6 de partido cuando tras una gran jugada de Suárez, el ablitero sacaba el disparo, que se marchaba a la izquierda del marco defendido por Unai Aguirre.
Estos iban a ser los mejores minutos del Tudelano posiblemente en todo el encuentro, unos minutos de posesión en campo contrario con llegadas por banda y una presión exitosa y muy adelantada, que hacían sufrir a los tudelanos. A partir del minuto 10, el partido cambió y los pupilos de Xabi Alonso comenzaron a tener más el balón y a dominar el juego. La más clara para los potrillos del Sanse llegó en torno al minuto 12 de partido cuando Nais Djouahra enviaba el balón al travesaño.
A partir de este momento el partido comenzó a perder en intensidad y se desarrollaba con un Tudelano replegado en campo propio mientras los visitantes intentaban generar mediante la posesión de balón. Fue destacable el remate de Azkue al travesaño en el 21 de la primera parte, tras un centro de Zabaleta en una falta lateral. Poco más se pudo ver en la primera mitad, en la que fue destacable el trabajo defensivo de Lalaguna, siendo impecable al cruce durante todo el partido.
La segunda mitad arrancaba con la misma tónica con la que había finalizado la primera, pese a que los locales, pese a defender en bloque intentaban en ciertos tramos adelantar las líneas de presión, pero sin fortuna. Los guipuzcoanos, muy seguros y quizá, muy conformistas, dominaban el juego pero sin profundidad, por lo que los tudelanos se encontraban cómodos sobre el césped.
A los 2 minutos de juego de la segunda, iba a ser anulado el tanto de la Real Sociedad B, por claro fuera de juego, y 2 minutos después la tenía M. Díaz, que no era capaz de transformar el primero, tras no poder batir a Unai Aguirre en el mano a mano. Parecía que se animaba el partido pero poco iba a durar, dado que ambos técnicos arengaban a sus equipos para que mantuviesen la calma. Fue clara también una ocasión de Obieta en el 67 de partido, cuando su remate a centro de Zabaleta, se iba a escasos centímetros del marco de los visitantes.
Movía el banquillo Jose María Lumbreras, e ingresaba en el campo Edson Torres en lugar de M. Díaz. El mejicano que es pura chispa, aceleraba el ritmo de los locales pese a estar impreciso y aliviaba el arreón visitante. La tuvo también Soto en el 86 cuando Zabaleta le servía un gran centro lateral, pero el remate del ‘11’ blanquinegro se marchaba arriba.
No existió más fútbol hasta el pitido final, que marcaba las tablas en el marcador, practicamente «pactadas» por ambos equipos desde el 85 de partido dónde ambos firmaban la «x». Fue destacable la entrada de Lázaro en el 87 de partido, volviendo a jugar en liga tras casi 1 año natural. El mediocentro blanquinegro recibió una sonada ovación de la hinchada, la cuál también debió escuchar el técnico blanquinegro.