El Sporting rompió hoy su pésima racha de cinco partidos sin ganar con un solitario gol de Djurdjevic que sirvió para superar a la Ponferradina en un pésimo partido en el que, además, los locales sufrieron la lesión de Manu García, su jugador más destacado en la presente temporada.
José Alberto mantuvo, como estaba previsto, una defensa con tres centrales y dos laterales adelantados con la que está empeñado en jugar en las últimas jornadas y la única sorpresa fue la presencia de Pablo Pérez en lugar de Aitor García en el equipo inicial.
La primera parte fue para olvidar porque los dos equipos se empeñaron en jugar balones largos que eran fáciles para la defensa rival y el centro del campo se limitó a rivalizar en cabezazo, lo que impidió una mínima continuidad en el juego.
En el minuto 7 se produjo la primera jugada polémica del partido cuando el árbitro mostró tarjeta roja al defensa Russo por un agarrón a Djurdjevic que se escapaba solo hacía la portería rival, pero el VAR advirtió que el delantero rojiblanco estaba en fuera de juego, aunque fuera por escasos centímetros, y la expulsión no se produjo.
Larrea, de cabeza, hizo el primer remate del partido cuando había transcurrido un cuarto de hora, y la siguiente jugada de peligro también fue de la Ponferradina, pero fue desaprovechada por Yuri, con un remate que salió alto.
El Sporting, que no marcó ni un solo gol en las últimas cuatro jornadas, disparó a puerta por primera vez en el minuto 31, si bien Caro detuvo sin problemas el lanzamiento que desde fuera del área había realizado Pedro Díaz.
Este disparo fue el inicio de los mejores minutos de los locales que en el minuto 36 estrellan un balón en el larguero en un remate apurado del central Babín en el lanzamiento de un córner.
La última ocasión de la primera parte fue de Yuri que lanzó desde lejos y dutuvo Mariño en una jugada tras la cual los jugadores se retiraron a los vestuarios en medio de una sonora bronca.
Molinero, que en los primeros minutos del partido sufrió un golpe en la cabeza, se quedó en el vestuario y la segunda parte la inició Borja López, un hombre más acostumbrado a jugar de central que el sustituido.
Nada más comenzar la segunda parte, Yuri, rozando de nuevo el fuera de juego, se plantó solo ante Mariño pero cruzó demasiado en una jugada que provocó de nuevo las protestas de los aficionados locales.
A partir de ahí, los visitantes iniciaron varios ataques seguidos que, si bien no crearon ocasiones de gol, la defensa local no fue capaz de solventar , lo que provocó que José Alberto hiciera un segundo cambio dando entrada a Aitor García, un hombre mucho más veloz que el sustituido Pablo Pérez.
Un disparo de Borja López desde fuera del área al que respondió Caro con una gran parada sirvió para espolear a los rojiblancos que se lanzaron al ataque. En una de esas jugadas, Traver centró sobre Durdjevic un balón que remató mal de cabeza y que parecía haber dado en una mano a Russo, aunque la revisión del VAR no lo apreció.
El juego de los dos equipos seguía siendo un auténtico despropósito y las protestas de los aficionados locales ya eran unánimes, pero una jugada aislada en un pase de Manu García sobre Djurdjevic permitió al serbio lanzar un chute cruzado que superó a Caro en lo que fue el primer gol de los rojiblancos tras 461 minutos de sequía goleadora.
El tiempo restante transcurrió entre constante interrupciones y alguna que otra entrada brusca, como la que recibió Manu García de Son, que ni siquiera fue señalada como falta lo que, unido a que el árbitro añadió siete minutos, provocó otra bronca de la grada.
Al final, el marcador no se movió y el Sporting se llevó tres puntos en un partido para olvidar y que tiene el lado positivo para los locales de que rompe su mala racha de resultados y el malo que habrá que esperar la gravedad de la lesión de Manu García que tuvo que ser retirado en camilla.