Osasuna Promesas visita uno de los estadios más difíciles del grupo e puntuar y, posiblemente, de la Segunda B. Se enfrentará a un conjunto con la moral alta: segundos clasificados, buscando dar caza al Logroñés y clasificados para la siguiente ronda de la Copa del Rey.
El equipo entrenado por José Manuel Aira, tras la victoria en Tudela, vuelve a su hábitat natural, donde más a gusto se siente y más seguro se muestra: el Reino de León. Contando su victoria copera, suman 3 victorias consecutivas, dos de ellas en casa,y ahora buscan la cuarta.
En el partido ante Las Rozas salieron en el once jugadores como Virgil, Antonio, Pichín, Luque, Augusto, Benito e incluso hubo minutos para Iván González, que vuelve de su lesión. Todos ellos con una actuación notable, que puede hacer del próximo once un quebradero de cabeza para Aira.
Improbable, aunque posible es que Benito juegue con Dioni arriba. Debido al estado del terreno de juego por el agua caída en estos últimos días, puede ser lo mejor. Sin embargo, apostará por Menudo en la mediapunta y Kawya y Gudiño por las bandas. Con Alfonso lesionado, Eric volverá a ser titular junto a Sergio Marcos. En defensa es done hay más dudas. Iván puede reaparecer jugando titular con Rodas, Aitor será el lateral derecho y Castañeda o Roberto Carlos por la izquierda.
Por su parte, el filial rojillo solo ha conseguido una victoria lejos de su feudo (1-2 ante el Guijuelo) y en sus tres últimas visitas ha conseguido un empate (0-0 ante el Leioa) y dos derrotas (1-0 contra el Haro y 3-1 con la Real Sociedad ‘B’). Fuera de su estadio ha probado diferentes onces, donde siempre ha estado su máximo goleador, Barbero, que ha anotado ni más ni menos que 9 goles (igualado con Dioni).
El once elegido por Santi Castillejo puede ser un 5-2-3, al igual que contra la Real Sociedad ‘B’, con Zabarte y Endika en los carriles, Berruezo, Herrando y Lizárraga en el centro de la zaga, Santarfé y Hualde como mediocentros y arriba Calvillo, Aroz y Barbero.
Debido al estado del terreno de juego, será un partido no muy vistoso y en el que primará el centrocampismo y sobre todo, el acierto en las áreas.