El Deportivo ha conseguido llevarse los tres puntos de Los Pajaritos ante un rival que se jugaba entrar en puestos de playoff. Un gol a balón parado y una expulsión, con ayuda del VAR, por parte de los locales, facilitaron el trabajo a los blanquiazules.
Fernando Vázquez regresaba al banquillo del Dépor y ha conseguido cumplir ese dicho de “a entrenador nuevo, victoria segura”. Aunque esa frase andaba algo olvidada en el conjunto gallego. El de Castrofeito realizó un cambio en la formación con tres centrales, en los que incluyó a Mujaid en vez de a Lampropoulos, con un doble pivote en el centro del campo con Álex y Nolaskoain, y con Mollejo en la punta de la delantera. Sin embargo, el joven cedido por el Atlético de Madrid acabaría jugando en la banda derecha.
El Deportivo no ofreció nada nuevo en el juego, el cual tampoco fue vistoso. Basado en balones en largo sin mucho sentido. Por su parte, el Numancia no contó con ocasiones de gol aunque sí con muchos balones colgados al área, en especial con los fuertes saques de banda sacados por Marc Mateu. Donde el portero numantino, Dani Barrio, sí sufrió durante la primera mitad y, realmente durante todo el encuentro, fue con las faltas lanzadas por Aketxe. El vasco se atrevió con lanzamientos muy lejanos que, con el factor añadido del hielo que cubría una de las áreas, complicaban mucho la labor del cancerbero.
Fue al final de la primera mitad cuando el partido terminaría de dar un vuelco. En el área defendida por el Numancia, terminan por caer al suelo Gus Ledes y Mollejo, este último con amarilla, ambos aquejados. Parecía que se iba a quedar en nada hasta que desde a sala VOR avisaron al colegiado, Sagués Oscoz. El jugador de los locales al caer al suelo aparentemente lanzaría una patada al delantero blanquiazul y acabaría siendo expulsado.
La segunda mitad comenzaría con los visitantes atacando ante la situación de verse con un futbolista más. En el minuto 54, un córner lanzado por Aketxe sería rematado por Bóveda y, tras rechazar el balón Dani Barrio, Somma marcaría a placer para adelantar a los coruñeses. A partir de ese momento, el Dépor fue viniéndose a menos y el Numancia a más, pero sin llegar a crear un claro peligro.
Los gallegos tuvieron contrataques para poder haber matado el encuentro, pero siempre acababa fallando el último pase y provocando el contrataque rival. Es decir, en el juego, en la calidad, nada ha cambiado. No obstante, la suerte sí ha cambiado y, en ocasiones, esto es incluso más importante.
De esta manera, el Dépor consiguió una segunda victoria consecutiva, la tercera de la temporada, lo que le permite estar a 4 puntos de la salvación. En cambio, el Numancia perdió la oportunidad de subir hasta el cuarto puesto en la clasificación y se mantiene octavo con 32 puntos. La próxima jornada, que se disputará entresemana, los sorianos visitan al Alcorcón y los blanquiazules reciben a un rival directo, el Racing de Santander.