Ha llegado el momento de la temporada donde aparecen los hombres. Los jugadores se forjan y luchan por el objetivo que la temporada te ha metido hasta esta altura de año. En el Mallorca se han puesto el mono de trabajo y afrontan este reto como algo motivante.
Como dijo Miguel Verger, «El Mallorca parte con ventaja porque sus jugadores estan mentalizados desde el 23 de junio a las 23:00». Y si, el factor psicológico afecta y mucho a la manera de afrontar el tramo final de temporada. De hecho, plantillas como la del Espanyol, con mucha más calidad de lo que muestran, ha demostrado que sus jugadores no estan mentalizados de la situación en la que se encuentran. La plantilla se encuentra huérfana de líderes.
En el Mallorca, tras la victoria en Ipurúa, ven la luz y afrontan este tramo final de temporada con otro aire. Esta semana, los baleares reciben al líder, lo que puede suponer el último empujón para salir del pozo y empezar a depender de sí mismo. Una victoria ante el conjunto culé, puede dar una dosis de moral suficiente para acabar de convencer al grupo de la salvación.
Otro brecha que se ha abierto es la de las victorias fuera de casa. Los de Vicente Moreno han sacado 4 puntos de los últimos 6 en sus salidas. Saldados con 5 goles a favor, el conjunto balear ha afrontado estas dos salidas, al Villamarín e Ipurúa, han dejado sensaciones muy positivas.
Nuevo Mallorca
El Mallorca ha salido con otros aires. Una propuesta mucho más ofensiva que los otros partidos fuera de casa ha provocado ver al conjunto balear con mucha más soltura en la zona atacante y en Eibar, se demostró junto a un equipo sólido en fase defensiva.
Vicente Moreno encontró la tecla en el estadio armero. El 5-3-2, con Pozo y Lumor de carrileros, Sedlar, Valjent y Raillo en la línea de centrales. Esta formación provocó que el Mallorca tuviese superioridad por bandas a la hora de atacar y lo mismo, en fase defensiva delante de los centros laterales del Eibar. Cada vez que el balón iba dirigido al área, Sergi Enrich y Charles se vieron en inferioridad. Todo el tiempo había un 3×2, donde siempre salían ganando los zagueros baleares.
Profundos en fase ofensiva
En ataque, se vio a un Mallorca mucho más profundo. Tanto Lumor, como Pozo fueron puñales por sus bandas. El andaluz sufrió un poco con Orellana, pero en la segunda parte, de sus piernas se inició el segundo gol balear. El lateral de Ghana parece mucho más férreo en defensa y más decisivo en los metros finales. La potencia física de ambos les permite poder realizar carreras de este calado y la formación les cubre las espaldas con un doble pivote y los tres centrales.
Otro tema aparte, son Dani Rodríguez y Takefusa Kubo. Ambos se echaron el equipo a la espalda en fase ofensiva. El gallego estuvo estelar, a parte del gol, fue el generador del Mallorca. Desde el doble pivote se erigió por encima de Cristóforo y Diop, llegando rápido a las bandas donde Lumor y Cucho conectaban por dentro generando superioridad y llegando a los metros finales. Por su parte, el japonés fue decisivo en muchas de sus acciones. Cada vez que entraba en juego, atraía a dos defensores y dejaba libre a su compañero de banda. Con libertad de movimientos, en sus dos apariciones clave (falta previa y gol), el jugador bermellón estaba fuera de su zona inicial. En esos momentos, la superioridad por dentro, hizo que los defensas del Eibar estuvieran superados por la situación. A partir de ese momento, se olía peligro por el balcón del área armero
Parece que los baleares han llegado a su mejor momento fuera de casa en el momento clave de la temporada. Con Dani y Kubo a la cabeza, el Mallorca está más vivo que nunca.