El Cádiz, como el resto de clubes de la competición, ya suma algo más de un mes sin entrenar. Los jugadores lo hacen en sus domicilios, de forma individualizada y con las pautas marcadas por los preparadores físicos a distancia. Pero aunque ese entrenamiento pueda servir para mantenerse en forma a cierto nivel, nada sustituye el entrenamiento grupal y con balón en un terreno de juego. Por ello en el Cádiz tienen fijado el 4 de mayo en el calendario como una fecha importante.
Es cuando la entidad cadista planea regresar a los entrenamientos, eso sí, bajo las estrictas condiciones marcadas por el protocolo elaborado por LaLiga. Eso sería que en una primera fase lo harían en parejas de dos y por turnos. Sería así de forma paulatina y progresiva hasta que puedan hacerlo de forma grupal concentrados en la Ciudad Deportiva Bahía de Cádiz.
No obstante este plan está condicionado a algo indispensable que el Cádiz aún no tiene. El visto bueno de las autoridades sanitarias ni del Consejo Superior de Deportes (CSD). En el club andaluz no quieren ningún tipo de enfrentamiento con ninguna autoridad como ocurrió con la Real Sociedad o el Fuenlabrada. De forma que en caso de que alguna muestre reparos o, directamente, marque la prohibición, acatarán la decisión y pospondrán ese regreso a la actividad «normal».