No hubo goles en El Molinón-Enrique Castro «Quini» entre Sporting y Girona. Ambos conjuntos que legaban, al menos en teoría, muy necesitados para sumar la victoria, pero no se notó. Muy conservadores ambos conjuntos, lo que hizo que hubiera pocas ocasiones y ningún gol. Aunque, eso sí, ambos guardametas dejaron cada uno una parada antológica y ambos reclamaron un penalti a favor. En resumen, no puede haber un resultado más justo.
El partido empezó frío, sin un dominador claro aunque fue el cuadro gerundense quien tuvo la primera acción. Valery encaró a Mariño tras un error de Damián Pérez, pero definió mal al lateral de la red. La réplica gijonesa llegaría superados los diez minutos con un libre directo de Murilo que despejó Asier Riesgo con apuros.
A partir de ese primer tramo, el Sporting se hizo con la posesión, mientras que el Girona buscaba la contra tras robar y con espacios. Así, Maffeo tras una acción individual se encontró con una gran parada de Mariño y con una lesión muscular, pues el lateral del Girona tuvo que ser sustituido. Pero el Girona dejaba claro su plan y encontraba esos espacios. Poco después tras una acción de Valery, Gallar chutó mal y desviado en una franca posición. Ya en el 28′ un escenario similar con una contra conducida por Samu Sáiz y que de nuevo Gallar finalizó mal.
El Girona se mostraba más cómodo
El partido estaba muy igualado y ambas defensas muy seguras ante los intentos de ambos. El Sporting logró trenzar una buena jugada que Juanpe abortó cuando Manu García iba a rematar dentro del área y poco después el Girona reclamaría un penalti por mano de Javi Fuego. El balón impactó en el brazo del mediocentro local, pero el árbitro, bien situado no consideró punible la acción a pesar de las protestas del cuadro visitante. Finalizaba así una primera parte muy nivelada, pero en la que el cuadro de Francisco llevó más peligro.
Y lo volvió a demostrar nada más comenzar el segundo tiempo cuando Mariño metió una mano salvadora en un intento de vaselina de Stuani. El Sporting quiso hacerse con más balón y Murilo al 51′ buscó el ángulo, pero su disparo no cogió la debida rosca. Al 59′ volvió a aparecer la polémica, ahora en el área del Girona con un derribo de Calavera a Damián Pérez que tampoco fue considerado como pena máxima.
El Sporting lo intentó tímidamente al final
El partido se consumía de forma soporífera, sin ocasiones en ninguna de las dos porterías y con los equipos arriesgando entre cero y nada. Solo un error o una acción a balón parado parecía que hacer romper el marcador inicial. Solo en una acción en la que Nacho Méndez falla en una anticipación, Borja García pudo probar a Mariño que detuvo sin apuros. Pero la más clara la tuvo Javi Fuego en un saque de esquina obligando a Riesgo a hacer una parada salvadora. Y no fue la última, ya que al 88′ Unai Medina la pegó de volea desde lejos que se fue alto por muy poco.
No se movió el marcador y ambos suman un punto que sirve mucho más al Girona, que se queda quinto en la tabla y deja al Sporting muy lejos de los puestos de play-off. La próxima jornada será para ambos en apenas tres días. El Sporting se desplazará hasta el Carlos Belmonte, donde se medirá al Albacete el jueves a las 19:30 horas. Por su parte el Girona recibirá a la UD Almería ese mismo día, pero a las 21:45 horas, en Montilivi.