Miguel Ángel Cordero, capitán del Fútbol Club Cartagena, ha afirmado que «el mínimo error puede costar caro» en la pelea por el ascenso a Segunda División y ha vaticinado «un partido largo» el domingo ante el Atlético Baleares «en el que el gol de la victoria puede llegar en cualquier instante».
El centrocampista sevillano, de 32 años -cumplirá 33 el 10 de septiembre-, afronta su tercera temporada en el club blanquinegro, al que llegó en 2017 procedente del Nástic de Tarragona. La de esta campaña será su tercera fase de ascenso a Segunda y, tras quedarse a las puertas de subir en las dos primeras, confía en romper esa mala racha.
«Tenemos muchas ganas de competir tras estar mucho tiempo sin hacerlo, el equipo está entrenando bien y deseando que llegue el día para conseguir el objetivo», ha apuntado en declaraciones a la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) la semana en la que estará en juego algo tan importante en la fase exprés que se celebrará en el estadio La Rosaleda de Málaga.
Del Atlético Baleares, campeón del grupo I de Segunda B, ha destacado que «es un rival rocoso que sabe a lo que juega y que, como el Cartagena, lleva años buscando el ascenso».
Poniéndose en situación ha reconocido que «el mínimo error puede costar caro y hay que estar concentrados al 100% y saber qué hacer en cada momento pues el partido puede ser largo y el gol de la victoria puede llegar en cualquier instante».
El de Lebrija se ha referido a lo atípico de esta temporada y ha admitido que acabarla bien merecerá todos los esfuerzos hechos: «Ha sido un año diferente y raro, difícil para todos, y esperamos que sea el del ascenso».