El primer equipo del Sevilla desarrolló este domingo el último entrenamiento de la temporada en su Ciudad Deportiva. Este lunes viajará a Alemania, donde el martes se mide al Wolverhampton inglés en los cuartos de final de la Liga Europa y allí seguirá concentrado mientras siga adelante en este torneo continental.
El formato de esta fase de la Liga Europa tuvo que ser modificado por la UEFA debido a la pandemia de coronavirus. De forma que ahora, hasta la final, todas las eliminatorias se disputarán a partido único y a puerta cerrada en diversos estadios alemanes. Por ello, el club andaluz informó de que desde el lunes se instalará en Alemania y que cuando concluya su participación en la Liga Europa la primera plantilla y cuerpo técnico se tomarán unas vacaciones veraniegas. La vuelta a los entrenamientos para la pretemporada 2020/2021 dependerá de cuando finalice su participación.
La plantilla que dirige Julen Lopetegui inició el pasado viernes por la mañana en la ciudad deportiva la preparación del partido ante el cuadro británico. Fue después de que regresara de madrugada desde Duisburgo (Alemania) tras superar el jueves al Roma (2-0) en los octavos. Los futbolistas volvieron a reunirse el sábado para la segunda sesión preparatoria antes de la cita del próximo martes. Una cita que será en el mismo escenario, el MSV Arena de Duisburgo, que donde venció a la AS Roma.
Este domingo, el preparador guipuzcoano dirigió la tercera jornada de trabajo en Sevilla. Antes de saltar al terreno de juego, programó una sesión de vídeo y charla técnica de al menos treinta minutos. El lunes la expedición sevillista partirá hacia el aeropuerto de Dusselford a primera hora de la mañana y, tras instalarse en el hotel de concentración, el equipo se dirigirá ya por la tarde al escenario del encuentro para realizar la última sesión previa al partido.
Lopetegui, como ya sucedió ante el equipo italiano, no podrá contar con Nemanja Gudelj. El serbio sigue en cuarentena en su domicilio tras dar positivo asintomático en un test de COVID-19 y el protocolo sanitario impedir aún que vuelva a la dinámica del grupo. Éste, en principio, es el único inconveniente que presenta la plantilla, que afronta el partido sin sancionados y sin ninguna baja confirmada por lesión.