Se estrenaba el Real Madrid en casa tras sus dos primeros partidos como visitante, con una victoria y un empate en la clasificación. El Real Valladolid, con tres partidos jugados, seguía sin conocer la victoria este año y suma dos puntos, ambos conseguidos como local. El conjunto blanco quería continuar con la buena racha de partidos como local de la temporada pasada y los pucelanos repetir, o mejorar, el empate de la campaña anterior en el Bernabéu.
El encuentro comenzó animado y con intensidad en ambos lados del campo. El Real Madrid dejó claro desde el principio que quería ser el dominador del partido con posesiones largas, algo que no parecía preocupar a los de Sergio, que se encontraban cómodos saliendo rápidos a la contra con Hervías, Waldo, Orellana, Plano y Weissman. Pese a que los dos equipos gozaban de sus oportunidades, las primeras jugadas de peligro llegaron por parte de los blancos. En el minuto 10, Roberto tuvo que hacer una gran parada a disparo de Valverde desde el interior del área, la segunda llegó poco después en una contra lanzada por el propio jugador uruguayo, que puso un centro al interior del área al que no llegó Jovic por poco.
Pasados los primeros 30 minutos de juego, el Real Madrid insistía en la posesión y en mover el balón de un lado a otro. El Pucela mientras ganaba seguridad atrás, crecía poco a poco intensificando la presión e imprimiendo mas calma al balón y velocidad en la contra. Fruto de esa mejora y relativa comodidad llegaron varias ocasiones para los visitantes, pero sin demasiado peligro. Sin tiempo añadido sobre los 45 reglamentarios, se llegaba al descanso con un Real Valladolid que terminó la primera mitad mucho más cómodo que el equipo de Zidane.
Comenzó la segunda parte y no pasaron ni 10 minutos para ver dos llegadas muy peligrosas, posiblemente las mejores llegadas hasta el momento, una por cada equipo. A los dos minutos, Roberto tuvo que sacar otra mano abajo magnífica para detener el cabezazo de Jovic y en el rechace Casemiro la mandó al larguero. En el minuto 54, fue el Real Valladolid quien tuvo la oportunidad de adelantarse en el marcador con un gran disparo desde la frontal de Weissman que obligó a realizar una estirada complicada a Courtois.
Los cambios de Zidane (Vinicius, Asensio y Carvajal) provocaron otra cara en el Real Madrid y sumado a un grave error en zona defensiva de Bruno llegó el primero del Real Madrid. En el minuto 65, el central blaquivioleta se la jugó en una zona prohibida y tras un rechace en el interior del área, Vinicius define frente al portero para adelantar al Real Madrid. Con los cambios y el gol, los locales continuaron muy cómodos gracias a la frescura de los hombres de arriba. El Pucela, en cambio, pese a perder algo de protagonismo en campo rival, seguía con sus opciones a la contra confiando en un gol en los últimos minutos.
Finalmente ese gol no llegó y el Real Madrid se lleva los tres puntos en un encuentro en el que el empate, por lo visto en el campo, hubiera sido lo más justo. El Real Valladolid realizó un gran partido en casa del actual campeón, pero los regalos se pagan y hoy lo volvió a comprobar.