El Villarreal sigue adelante en la Copa del Rey tras una eliminatoria que resolvió 1-4 en el campo del Zamora CF de Segunda B, conjunto que plantó cara en algunos momentos pero que tuvo que rendirse ante el buen hacer de los jóvenes del conjunto castellonense.
Unai Emery contó de salida con Etienne Capoue, recién llegado del Watford inglés, que acusó su falta de acoplamiento y apenas entró en juego en un encuentro en el que sobresalieron entre los amarillos Yeremi, Baena y Chukwueze y en el que el rojiblanco Ramos firmó de un fuerte disparo el gol de la jornada.
El Villarreal tardó más de veinte minutos en coger la temperatura al partido en un campo helado en el área defensiva castellonense.
La defensa avanzada del equipo local se le atragantó en los primeros compases al submarino amarillo, pero a medida que pasaron los minutos comenzó a sacarle rédito y trenzar las primeras ocasiones de gol gracias a las adelantadas posiciones rojiblancas.
Emery confió para el encuentro en la juventud de jugadores como Yeremi Pino y Alex Baena y ambos demostraron que se puede alcanzar la madurez antes de los veinte años.
El canario firmó uno de los goles y almeriense dio cuenta de su visión de juego para crear jugadas de ataque claras.
Los visitantes vivieron sus momentos de gloria a partir del minuto 27 con un Chukwueze muy activo que vio el desmarque de Bacca a la media hora para que el colombiano se plantara frente a Mapisa y marcara a placer tras regatearle por la derecha.
A partir de ahí el Villarreal ganó confianza y de no ser por el acierto del guardameta de Zimbabue y el palo en el que se estrelló un balón de Chukwueze la renta se había incrementado antes.
Pero no fue hasta poco antes del descanso cuando Yeremi Pino sorteó a su defensor para chutar y marcar el gol que daba la tranquilidad a los amarillos.
Poco duró esa ventaja ya que antes del descanso, en un balón despejado por la defensa castellonense tras saque de falta, Ramos desde más de 30 metros pegó un chut perfecto que se coló por la escuadra soprendiendo a Rulli.
En la segunda parte, el Villarreal tomó de nuevo la batuta del partido pero sin mucha confianza ante un Zamora CF más adelantado pero sin crear peligro.
Los visitantes tardaron en hilar jugadas de gol, salvo dos oportunidades de Bacca, lo que llevó a Emery a introducir un triple cambio en el minuto 62 que le sirvió para dar frescura a su ataque.
Tanto Bacca como Yeremi tuvieron oportunidades de ampliar la ventaja para los visitantes pero el césped helado del Ruta de la Plata les jugó una mala pasada.
Los cambios demostraron de nuevo el valor de la cantera villarrealense, ya que Fer Niño firmó el tercer gol amarillo en un brillante remate de cabeza adelantándose a la zaga rojiblanca, a saque de esquina.
Poco antes del final, Raba no pudo tener mejor entrada al campo al hacer valer su rapidez en un contraataque para superar a Mapisa.