El Cornellà suma su segunda victoria consecutiva en casa al ganar por 2-0 al Badalona. Unos tres puntos de los que estaban pendientes más de un equipo y una afición. El Nàstic tenía los ojos puestos en este encuentro porque si se desenvolvía de la forma que lo ha hecho tenía premio. Así que el gol de Pablo Fernández y otro de Chiki han alegrado la tarde a más de uno.
Tal como se iba desenvolviendo la primera mitad se percibía que la bola parada tendría mucho protagonismo. Y, más siendo el Cornellà uno de los que estaba en el verde con Agus Medina. Primero fue Víctor Fernández quien probó suerte en una de estas faltas tan bien puestas por Agus. Ese cabezazo no tuvo fortuna por escasos centímetros. El que si se acabó celebrando el gol fue Pablo Fernández. Con el mismo guion pero cambiando el protagonista rematador. Agus Medina sacaba la falta. Fede Bikoro intentó despejar pero la pelota quedó muerta. Pablo Fernández fue el más listo de clase, se hizo con el esférico y lo mandó al fondo de la red.
El Badalona no se hizo pequeño en ningún momento después del tanto, pero las ocasiones peligrosas no llegaban ni a Ramón Juan ni a Alex Sánchez. Las únicas bolas que podían poner en peligro las porterías de ambos conjuntos eran los disparos de falta. La bola parada podría haber firmado el partido si el penalti que reclamaron los jugadores del Cornellà se hubiera pitado. Fue justo antes del descanso se vivió una de esas ocasiones que si se pita está bien y si no lo hace, también. Pero no se pitó y el Badalona se fue con posibilidades al entretiempo.
A la vuelta parecía que ambos conjuntos se jugaran la vida en ese césped. Un Cornellà algo más enchufado que el Badalona buscaba sin cesar ese segundo gol que les dejara respirar. Los de Manolo González visualizaban el empate, pero no contaban con reencontrarse con Ramón Juan en la portería.
Igual se esperaba que en la segunda mitad el Cornellà se encerrara para salvaguardar ese marcador favorable. Pero quien arriesga no gana. Los verdes estaban muy enchufados y les estaba saliendo todo redondo. Chiki fue el reflejo de todo eso. Primero controló el esférico, después encaró y finalmente, con toda su tranquilidad, remató cruzándola ante el portero para anotar un auténtico golazo.
A partir de aquí fue cuando el Badalona empezó a caer en picado. En las caras y los gestos de los jugadores se veía la desesperación al perder un balón o al no poder anotar alguna jugada. El resultado pudo ser peor para los visitantes. Al final del encuentro Alex Sánchez protagonizó la mejor parada del partido. Una maniobra genial de Eloy Gila que pudo materializar Alex Serrano, pero el guardameta del Badalona sacó un pie providencial para evitar el tercero local.
Con el 2-0 el Cornellà dejaba los puntos en casa una jornada más para situarse con 25 en la sexta plaza. El Badalona se pone cuarto con 27 y la próxima jornada descansara.